EL REY DEL CAMERÚN Y ALFONSO XIII
HACE CIEN AÑOS SE FIRMÓ EL TRATADO DE VERSALLES, QUE PUSO FIN A LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL. AUNQUE LOS PRINCIPALES COMBATES TUVIERON LUGAR EN LAS TRINCHERAS DE EUROPA, LA GUERRA TAMBIÉN AFECTÓ AL MUNDO COLONIAL. CENTENARES DE ALEMANES Y MILES DE CAMERUNESES SE REFUGIARON EN LA COLONIA ESPAÑOLA DE GUINEA. UNO DE LOS CABECILLAS DEL CAMERÚN, EL REY ATANGANA, QUISO AGRADECER A ALFONSO XIII SU PROTECCIÓN DURANTE LA GUERRA. EL REY AFRICANO REALIZÓ UNA EXÓTICA VISITA A MADRID A TAL EFECTO, AUNQUE ESCONDÍA OTRA MISIÓN MÁS DIFÍCIL: SOLICITAR LA MEDIACIÓN DEL REY ESPAÑOL PARA QUE CAMERÚN RETORNARA AL DOMINIO ALEMÁN.
E manifieston Madrid, a comienzos de 1918, se publicó un
bajo el título de Paz, Humanidad y Justicia. Decía: “Sentimientos de deber y gratitud me impelen… no queriendo pasar a la ligera la grata satisfacción que he experimentado en esta tierra española caballeresca y noble, en donde vida tiene el santo y virgen espíritu de la Religión santa del Catolicismo, que hombre Cristo nos predicó, y en la que los españoles tienen toda su fe”.
La importancia de estas líneas no radica en su significado sino en su autor. Bajo el nombre de Carlos Atangana, Jefe de los Yaundes, se hacía conocer en la capital de España uno de los principales líderes del Camerún. Atangana pedía en su manifiesto la repatriación de todos aquellos cameruneses que huyeron con los alemanes y que el gobierno español tomó bajo su amparo. ¿Cómo comenzó esta historia?
ÉXODO EN EL CAMERÚN ALEMÁN
La Primera Guerra Mundial (1914-1918) está asociada, en el imaginario popular, al infierno y miseria de la guerra de trincheras. Si bien es verdad que las principales y más duras batallas se libraban en las trincheras del Viejo Continente, con nombres resonantes como Verdún, Somme o Ypres, también se combatió en las colonias. Alemania poseía un escaso y disperso imperio colonial en África. La escasa guarnición alemana que defendía su colonia del Camerún, en África central, fue derrotada por las tropas aliadas al cabo de casi dos años de campaña (1914-1916).
La superioridad de los aliados (franceses y británicos) era manifiesta en número de soldados, municiones, aprovisionamientos y potencia naval. Ante esta debacle la resistencia de las tropas alemanas era cuestión de tiempo aunque el mando colonial alemán, dirigido por