LA VOZ dormida
Parece difícil encontrar a estas alturas, entre tan vasta bibliografía sobre aquel periodo, un libro medianamente revelador –incluso estremecedor– sobre el Holocausto, pero es sin duda el caso de este maravilloso libro, Como una rana en invierno, que acaba de editar Altamarea. ¿Qué implicaba ser mujer en Auschwitz? ¿Qué supuso y cómo se llevó a cabo esta doble profanación del ser humano y de la feminidad como elemento generador de vida?
A estas trascendentales preguntas responde con una firmeza alejada de conmiseración lastimera Daniela Padoan a través del testimonio directo de tres mujeres que conocieron el infierno en la tierra: Liliana Segre, Goti Bauer y Giuliana Tedeschi, que sobrevivieron al campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau.
Sus recuerdos, plasmados en una narración implacable, contribuyen a dar visibilidad a las vivencias de las mujeres, cuya voz, silenciada durante décadas por el relato de la experiencia masculina, ha sido tradicionalmente relegada a los márgenes de la historiografía de la Shoa, del Holocausto. "Afrontar la particularidad del sufrimiento y de los abusos padecidos por las mujeres, así como su específica forma de resistir y testimoniar, puede servir para ampliar el ámbito de la reflexión", tal como sostiene el epílogo.
Un libro para reflexionar sobre lo fuimos, y lo que deberíamos ser.