PIRÁMIDES EN SAQQARA
ElEl piramidión constituía el bloque final de la pirámide. De hecho, al ser una pirámide en miniatura seguramente poseía un significado simbólico; de ahí que su colocación fuese motivo de una ceremonia en la que estaba presente el faraón. Un relieve hallado en la calzada de acceso de la pirámide de Sahure, de la dinastía V, nos muestra a un cantante llamado Semerka delante de 18 trabajadores repartidos en dos filas que tiran de sendas cuerdas atadas a un trineo sobre el que va montado el piramidión; de espaldas a ellos, dos sacerdotes observan el bloque tallado mientras llevan a cabo una ceremonia acompañados por cuatro cantantes que baten palmas y un trabajador que derrama agua delante del trineo. Uno de estos dos oficiantes es el sacerdote uab («puro») Merynefu, que en una mano lleva un pañuelo doblado y en la otra alza un espantamoscas. El piramidión no es visible en el bloque, pero el texto nos informa con claridad de que estaba revestido de electro: «Trayendo el piramidión de oro blanco de la pirámide “El alma de Sahure brilla” por parte de los dos equipos de los dos barcos». El piramidión de la pirámide de Sahure no se ha encontrado, pero quizá todos los piramidiones de las dinastías V y VI estuvieran revestidos de reluciente metal precioso, porque, al parecer, lo mismo sucedía con el que coronaba la pirámide de la reina Udjebten, esposa de Pepi II, de la dinastía VI. En cambio, los piramidiones de las pirámides de la III y la IV dinastías parecen haber sido sólo de piedra. Es lo que sucede con el que coronaba la pirámide Roja de Esnofru en Dashur, formado por cinco bloques, el quinto de ellos en forma de pequeña pirámide. Por su parte, parece que los piramidiones que coronaron la cima de las pirámides de la dinastía XII eran de basalto y estaban decorados con una inscripción con el nombre del faraón, como se puede ver en el de la pirámide de Amenemhat III en Dashur.