LA CIUDAD PROHIBIDA DE PEKÍN
DESDE EL SIGLO XV hasta 1912, la Ciudad Prohibida de Pekín fue el hogar de los emperadores de China. El día a día del soberano estaba regido por unos estrictos códigos, incluso a la hora de elegir la concubina con la que pasaría la noche. Rodeado por todo tipo de lujos y por una corte de funcionarios y eunucos que gobernaba el país por él, el protocolo no le permitía salir al exterior, convirtiéndolo en un prisionero dentro de su propio palacio.