El hallazgo de la tumba de un niño romano y su mascota
UnUn equipo de arqueólogos franceses del INRAP (Instituto Nacional de Investigaciones Arqueológicas Preventivas), dirigido por Laurence Lautier, ha realizado un sorprendente descubrimiento durante las obras de ampliación del aeropuerto de ClermontFerrand, en la localidad francesa de Aulnat: la tumba tumba de un niño de un año fechada en el siglo I d.C., durante el dominio romano de la Galia. El niño fue inhumado en un ataúd de madera de 80 centímetros de largo; aún se conservan los clavos que sirvieron para remacharlo. A su alrededor se dispuso un ajuar funerario formado por unos veinte objetos, que incluyen jarras de terracota en miniatura y vasijas de vidrio, así como medio cerdo, tres jamones y otros cortes de carne de cerdo y dos pollos sin cabeza.
En la tumba también aparecieron un anillo de hierro y un alfiler de cobre. Y, lo más interesante, un perrito con un collar hecho de adornos de bronce y una campanilla. Todo ello indica, sin duda, el rango privilegiado al que perteneció la familia de este infortunado pequeño.