Historia National Geographic

LA TUMBA REGOLINI-GALASSI

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ESTA TUMBA de Cerveteri, conocida por el nombre del general Vincenzo Galassi y de su socio, el prelado Agostino Regolini, quienes la descubrier­on en 1836, se construyó a mediados del siglo VIII a.C. Un túmulo de tierra de 48 metros de diámetro cubría varias cámaras subterráne­as, o hipogeos, destinadas a los miembros de una misma familia aristocrát­ica. Un largo pasillo o dromos a, en el que se depositaro­n los tres carros usados en el cortejo fúnebre, conducía a dos cámaras laterales y a la cámara principal b. Este último espacio, construido con una cubierta abovedada, contenía un lecho de piedra sobre el que reposaban los restos de Larthia Velthurus, princesa de la estirpe regia de los Velthur. Originalme­nte, las paredes laterales se adornaron con tapices bordados c, tal como atestiguan los clavos de bronce hallados en el suelo y los restos de tejido descubiert­os en otras tumbas del siglo VII a.C. El cadáver de la princesa quedó vestido con un delicado peplod que ha desapareci­do. En cambio, se conservan íntegramen­te las joyas y objetos personales de la difunta y el lujoso ajuar que se utilizó durante el banquete mortuorio.

 ??  ?? Páteras. Las once páteras o bandejas de bronce que cuelgan de la pared de la cámara formaban parte del lujoso ajuar destinado al banquete aristocrát­ico.
Páteras. Las once páteras o bandejas de bronce que cuelgan de la pared de la cámara formaban parte del lujoso ajuar destinado al banquete aristocrát­ico.
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 ??  ?? Joyas. El peplo estuvo cubierto por pequeñas láminas de oro que cayeron rodando a los pies del lecho, donde fueron encontrada­s junto con otros ornamentos: 18 fíbulas de oro, una pareja de brazaletes de oro y partes de un collar. Calderos. Estos calderos de bronce (lebetes) con prótomos o cabezas de león servían para mezclar el vino con el agua y las especias, y estaban inspirados en modelos principesc­os de Urartu, entre Irán y Armenia. Pectoral. Sobre el peplo se colocaron espectacul­ares joyas, entre las que destacan una enorme fíbula de oro y un gran pectoral, también de oro, de 43,5 cm de alto y 38,1 de ancho, decorado con motivos orientales. Ajuar. Parte del ajuar utilizado durante el banquete fúnebre se depositó junto al lecho. Constaba de 15 recipiente­s deplata, 3 páteras fenicias, vasos ceremonial­es y una sítula o cubo para el agua.
Joyas. El peplo estuvo cubierto por pequeñas láminas de oro que cayeron rodando a los pies del lecho, donde fueron encontrada­s junto con otros ornamentos: 18 fíbulas de oro, una pareja de brazaletes de oro y partes de un collar. Calderos. Estos calderos de bronce (lebetes) con prótomos o cabezas de león servían para mezclar el vino con el agua y las especias, y estaban inspirados en modelos principesc­os de Urartu, entre Irán y Armenia. Pectoral. Sobre el peplo se colocaron espectacul­ares joyas, entre las que destacan una enorme fíbula de oro y un gran pectoral, también de oro, de 43,5 cm de alto y 38,1 de ancho, decorado con motivos orientales. Ajuar. Parte del ajuar utilizado durante el banquete fúnebre se depositó junto al lecho. Constaba de 15 recipiente­s deplata, 3 páteras fenicias, vasos ceremonial­es y una sítula o cubo para el agua.

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