LOS TERCIOS, UNA MÁQUINA DE GUERRA
TEÓRICAMENTE, un tercio debía tener 3.000 efectivos en 15 compañías de 200 hombres, pero la realidad podía ser muy distinta. Así, el 10 de agosto de 1634, el tercio de Idiáquez (protagonista en Nördlingen) tenía 1.800 hombres en 23 compañías. Era una tropa veterana, con soldados particulares y reformados, oficiales que habían perdido su puesto al suprimirse sus unidades, pero seguían sirviendo por un sueldo superior al del simple soldado; luchaban en primera fila y daban ejemplo al resto. Mandaba el tercio un maestre de campo, con la ayuda de un sargento mayor; solían tener años de experiencia antes de ser nombrados por el rey, ya que al no existir academias de oficiales, la escuela era el propio ejército.