EL AÑO TERRIBLE
DURANTE LOS POGROMOS DE 1391, en Castilla y Aragón fueron asaltados y destruidos muchos barrios judíos (las juderías o aljamas, llamadas qahal en hebreo y call en catalán), y su población fue asesinada u obligada a convertirse al cristianismo. Numerosas sinagogas se transformaron en iglesias, y no pocas veces las antiguas inscripciones hebreas se cubrieron con yeso y cal.
EL ASALTO DE 1391 AL CALL DE BARCELONA (EN LA IMAGEN) MARCÓ EL FIN DE ESTA COMUNIDAD.