El continuo acecho de los bandidos
LAS CARAVANAS COMERCIALES que circulaban en la región en torno a Palmira se encontraban continuamente en peligro debido a los asaltos de los bandoleros. En una inscripción hallada en Palmira se recuerda que los comerciantes de la ciudad honraron a un conciudadano llamado Shoadu bar Belyada por haber salvado a una caravana comercial que regresaba del Tigris del asalto de un grupo de beduinos procedentes del desierto del Éufrates. El texto, datado en junio del año 144 d.c., comenta que Shoadu salió de Palmira con inteligencia y una gran fuerza y se enfrentó a Abdallat Ahitaya y a los bandidos que éste había reunido consigo, que acechaban desde hacía tiempo para robar la caravana.