Para saber más de la historia de Ucrania

Al margen de la dramática crisis actual, Ucrania merece un interés que no siempre se le ha prestado desde España, como indica el hecho de que no exista en castellano una historia general del país. Pese a ello, sí contamos con una serie de obras literarias que permiten adentrarnos en los grandes momentos de la historia ucrania. El mundo de los cosacos del Dniéper entre los siglos XVI y XVIII fue evocado con simpatía y cierto folclorismo por

Nikolai Gogol en su novela Tarás Bulba (1842). Sobre la Ucrania gobernada (y oprimida) por los zares en el siglo XIX, el mejor testimonio se encuentra en Tarás Shevchenko, el poeta nacional ucranio, del que desgraciadamente no hay traducciones recientes, así como en los cuentos de Gogol recogidos en Veladas en un caserío de Dikanka (1832) y Mírgorod (1835).

La situación de los judíos ucranios a finales del zarismo aparece en los Cuentos de Odesa, de Isaac

Babel (1924), o en la novela del norteamericano Bernard Malamud, El reparador (1968). El período 19171921, con la guerra entre nacionalistas ucranios, rusos blancos y comunistas, es el marco de dos novelas soviéticas: La guardia blanca, de Mijaíl Bulgákov (1924), y Así se templó el acero, de Aleksandr Ostrovsky (1934; Akal). La hambruna provocada por Stalin en 1933 es el tema del modélico estudio de Anne Applebaum, así como de Tierras de sangre de

Timothy Snyder (Galaxia Gutenberg), que la sitúa en un contexto más amplio.

Dos novelas, Las benévolas, de Jonathan Littell (Galaxia Gutenberg, 2020) y Todo está iluminado, de Jonathan Safran Foer (Seix Barral, 2002), evocan el genocidio de los judíos ucranios durante la segunda guerra mundial. Sobre la disolución de la URSS y la independencia de Ucrania en 1991 es muy recomendable El último imperio, del ucranio Serhii Plokhy (Turner, 2020). Y sobre la crisis de los últimos años cabe destacar el reportaje de Argemino Barro: Una historia de Rus: crónica de la guerra en el este de Ucrania (La Huerta Grande, 2020).