¿QUÉ ES LO QUE SIENTE UN SOLDADO?
El papel de los miembros de la Wehrmacht en la Segunda Guerra Mundial
Las entrevistas, memorias y autobiografías resultan eficaces herramientas con las que reconstruir el pasado. Sin embargo, suelen carecer de la espontaneidad necesaria, al estar mediatizadas por las reflexiones y los intereses del protagonista, en especial cuando éste ha intervenido en hechos dramáticos o los ha experimentado. De ahí la importancia que, para la historia de la participación alemana en la Segunda Guerra Mundial, ha tenido el hallazgo de Sönke Neitzel. Esta historiadora ha dado con miles de transcripciones de escuchas secretas realizadas, por parte de los servicios de inteligencia anglo-americanos, a prisioneros alemanes durante su permanencia en las cárceles y los campos de concentración aliados. Los reclusos creían poder hablar libremente con sus compañeros sobre lo vivido sin tener que ocultar sus auténticos sentimientos. Eso es lo que convierte estas transcripciones en documentos excepcionales. Para empezar, resultan fundamentales a la hora de enjuiciar el papel de los miembros de la Wehrmacht (las fuerzas armadas germanas) en la guerra. Hasta no hace mucho, las matanzas que tuvieron lugar durante la conf lagración se atribuían en exclusiva a las SS y la Gestapo. Ahora predomina la impresión de que los integrantes de la Wehrmacht participaron en ellas de forma activa.
No solo hechos
Pero para analizar el papel de los soldados alemanes es necesario trascender el ámbito de los acontecimientos y ahondar en el campo de la psicología social. Así lo han entendido Neitzel y su cole- ga, Harald Welzer, quienes, al frente de un equipo multidisciplinar, nos ofrecen en este volumen unas conclusiones plagadas de turbadores ejemplos. En opinión de los autores, la mayoría de los soldados alemanes tenían constancia de los crímenes que se sucedían, y no pocos –aunque la cuantificación resulte difícil de hacer– tomaron parte en ellos. Sin embargo, debido a sus marcos de referencia, las masacres nunca ocuparon un lugar especial en sus preocupaciones. Para aquellos hombres, lo más importante era sobrevivir a la cruenta lucha. Por tanto, un buen destino, un permiso o una
cama caliente cobraban mayor importancia que la suerte de un grupo de judíos o de prisioneros rusos. Sobre todo teniendo en cuenta que “no se daban las alternativas de actuación y las posibilidades de elección que la pluralidad de los roles ofrecen en la vida cotidiana”. Soldados del Tercer Reich se convier te así en un apasionante estudio que, sin pretensión de exculpar a nadie, permite comprender cómo, bajo determinadas condiciones, los seres humanos de psicología normal pueden realizar actos que nunca llevarían a cabo en otras circunstancias. Texto: Sergi Vich Sáez