MUY ALTAS TEMPERATURAS
Creencias estrafalarias en torno a las prácticas sexuales.
LA ENERGÍA VITAL
Según los médicos romanos, muy influidos por sus colegas griegos, el semen es portador de energía vital. Por eso los varones son más fuertes y su temperatura corporal es más elevada que la de sus compañeras femeninas. Un exceso de relaciones sexuales podía, por tanto, enfriar al hombre, vaciándolo de energías. Galeno, en el s. II, recomendaba moderación. Sorano, experto en ginecología, aconsejó la virginidad perpetua para asegurar una larga vida. Para curar la epilepsia, en cambio, se aconsejaba adelantar la edad de las primeras relaciones sexuales.
TEORÍAS DEL MOVIMIENTO
Sobre la fecundidad también había ideas contradictorias. Según una creencia muy extendida, los movimientos de cadera de las cortesanas tenían la finalidad de evitar los embarazos. Por tanto, una esposa que quisiera ser fértil debía quedarse quieta y huir del placer. A partir de Galeno, en cambio, se considerará imprescindible el orgasmo femenino para garantizar la concepción. Todo un adelanto para las romanas. (Abajo, escena erótica en un bajorrelieve pompeyano, ss. I-III a. C.)