Una novia para Luis XIV
SE CUENTA QUE, a mediados del siglo xvii, cuando Luis XIV cumplió la mayoría de edad, el cardenal Mazarino (abajo) creyó llegado el momento de buscarle esposa. Pero el rey le respondió que ya tenía hecha su elección: María Mancini. Precisamente, la joven y bella sobrina del cardenal. Mazarino, con la perspicacia política que le caracterizaba, se negó en redondo y defendió la opción de una infanta española, María Teresa de Austria, diciendo al enamorado: “Señor, os he recomendado apoyaros sobre los burgueses, pero no sobre las burguesas”.