Las dos caras de la pasión
La pieza se presta a diversas interpretaciones
La copa Warren, de once centímetros de alto, posee una pureza del 95% en plata, con algunos apliques en cobre, oro y plomo. Se realizó en cinco partes, de las que hoy en día faltan las asas. Este tipo de copas solían producirse en pares para compartir su uso en banquetes, pero solo nos ha llegado un ejemplar. A pesar del desgaste y de alguna rotura, presenta un excelente estado de conservación. Su decoración gira en torno a las figuras humanas, destacando dos escenas.
La cara A,
ambientada en un interior o en un pórtico, muestra a un joven recostado sobre un adulto barbado, mientras este último le penetra. La escena, acompañada por una lira, se completa con un niño que observa todo a través de una puerta entreabierta.
En la cara B, un joven penetra a un niño que está entrando en la pubertad, en una escena con dos auloi, o flautas, como decoración.
griegos: por un lado, un adulto griego barbado penetrando a un joven griego imberbe; por el otro, un personaje joven imberbe penetrando a un niño que está entrando en la pubertad. El estilo de sus peinados indica que eran ciudadanos griegos. Nos hallamos, pues, ante una representación deliberada de los tipos de relaciones pederastas griegas ante los ojos de un romano, para quien se realizaría la pieza. El reconocimiento oficial del que gozó la pederastia en la antigua Grecia no existió, por el contrario, en Roma, aunque sus ciudadanos serían conscientes del orden característico de algunas ciudadesestado griegas, tema que discutirían en banquetes y reuniones, en los que, sin duda, la copa fue utilizada. Algunas de las figuras de la copa son menores de edad, por lo que sus actos, a ojos del observador actual, resultan intolerables e inmorales para nuestra sociedad. Sin embargo, no resulta difícil imaginar que, para el observador antiguo, la escena representada era una realidad cercana, motivo que explica la creación de un objeto que nos recuerda que la sexualidad y su concepción social no son fijas e invariables, sino fluidas y cambiantes a lo largo de la historia. ●