Historia y Vida

El trágico viaje del St. Louis

Varios países rechazaron a cerca de mil judíos a la deriva

-

El 13 de mayo de 1939, el buque alemán SS Saint Louis zarpó de Hamburgo con 937 pasajeros a bordo, la mayoría, judíos alemanes (arriba, dos niños). Su destino era Cuba, donde los refugiados harían escala, a la espera de ser admitidos en EE. UU. Tras dos semanas de viaje, llegaron a La Habana. Cuando se disponían a desembarca­r, el capitán les informó de que las autoridade­s cubanas les negaban el acceso. El presidente Federico Laredo Brú, presionado por grupos antisemita­s locales, que días antes se habían manifestad­o en contra del desembarco, y por Washington, decidido a frenar la masiva inmigració­n que llegaba a través de la corrupta oficina de migración cubana, se negó a aceptar los permisos de desembarqu­e. Salvo 28 pasajeros, que contaban con visados, los demás fueron obligados a marcharse.

El St. Louis viajó hasta Miami, con la esperanza de que EE. UU. los admitiera. Sin embargo, a pesar de las peticiones de auxilio de las organizaci­ones judías, los refugiados fueron nuevamente rechazados. De regreso a Europa, cuando todo hacía presagiar que tendrían que volver a Alemania, el Congreso Judío Estadounid­ense llegó a un acuerdo con Francia, los Países Bajos, Bélgica y Gran Bretaña para que admitieran a los pasajeros. Los 288 refugiados que entraron en Gran Bretaña pudieron sobrevivir al Holocausto. El resto corrió peor suerte: casi la mitad murió en los campos de exterminio.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain