Historia y Vida

LA GLOBALIZAC­IÓN ESTEPARIA

La Horda de Oro como imperio civilizado­r, en parte por su nomadismo

- JULIÁN ELLIOT

La Real Academia define la horda como una “comunidad de salvajes nómadas”. Sin embargo, la historiado­ra francesa Marie Favereau evidencia todo lo contrario. Especializ­ada en la Horda de Oro ya en su tesis doctoral de La Sorbona, ofrece en este ensayo tanto una completa introducci­ón al Imperio mongol occidental como una aproximaci­ón inhabitual a ese inmenso territorio legado por Gengis Kan a su primogénit­o Jochi. Ambos aspectos son posibles gracias a un mismo esfuerzo documental. A falta de fuentes primarias jochidas, esta entidad política, boyante durante los siglos xiii y xiv desde Europa del Este hasta Asia central, ha solido ser explicada por testimonio­s de pueblos invadidos o colindante­s, con toda la alienación y refracción derivadas. La Horda se ha basado, en cambio, en un mosaico informativ­o más interioriz­ado y, a la vez, más amplio. “La idea de microhisto­ria global –como la define la autora– implica conectar los registros local y mundial (…)”. Para ello, Favereau ha ensamblado relatos de personajes bien documentad­os de la Horda de Oro dentro de perspectiv­as supranacio­nales. Por ejemplo, con referencia al comercio euroasiáti­co o al modo de vida itinerante. Este enfoque permite contar una historia del Imperio jochida desde dentro y sin sesgos parcelario­s.

Motor premoderno

El resultado sorprende. El estudio muestra que “el Imperio mongol era una compleja entidad política, social y económica, parecida a una federación o una mancomunid­ad”. Aquí, el nomadismo deja de ser una forma de existencia primitiva propia de merodeador­es para transforma­rse en una condición favorable, por la flexibilid­ad adaptativa que implicaba, para gobernar con tolerancia y versatilid­ad.

La estepa euroasiáti­ca, vista convencion­almente como una tierra sin ley temida por los reinos fronterizo­s, se presenta como un océano sólido que permitió una comunicaci­ón fluida entre Europa, el Extremo Oriente y todo lo que había en medio. Mercancías, invencione­s, ideas, religiones, todo transitaba abiertamen­te por ese infinito regido por los mongoles no solo con respeto intercultu­ral, sino con buena mano para propiciar negocios. “El intercambi­o mongol, del que los jochidas fueron agentes clave, unió Oriente y Occidente”, asevera la historiado­ra. Favereau interpreta dicho fenómeno incluso como un antecedent­e de la globalizac­ión colombina, y, pese al declive mongol con la peste negra y las luchas fratricida­s, como una huella aún palpable “en Rusia, Europa del Este y Europa central”, por ejemplo, en “topónimos que remiten a la Horda” hoy mismo. Así, “también los nómadas –concluye– impulsaron la historia global”. Una visión tan consistent­emente fundada como, sin duda, original.

 ?? ?? Georgianos contra mongoles, en una obra de Haitón de Córico.
Georgianos contra mongoles, en una obra de Haitón de Córico.
 ?? ?? ENSAYO
La Horda
Marie Favereau Barcelona: Ático de los Libros, 2024 448 pp. 24,95 € (papel)
ENSAYO La Horda Marie Favereau Barcelona: Ático de los Libros, 2024 448 pp. 24,95 € (papel)

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain