66 PC Engine SuperGrafx
La consola de los cinco juegos
PC Engine era una máquina de éxito en Japón, pero NEC se obsesionó en buscar sucesora.
Nos encontramos en 1988. Los brillantes ingenieros de Hudson Soft y NEC Home Electronics que diseñaron PC Engine, segunda consola más vendida en esa época tras Famicom, necesitaban plantar cara a la futura 16 bits de Nintendo. La prensa japonesa comenzó a filtrar las primeras informaciones sobre el nuevo proyecto PC Engine 2 de NEC/Hudson Soft y algunas características técnicas, como sus 32K de RAM o 128K de vídeo RAM, aparecían junto a bocetos del atrevido diseño de la máquina. La idea era que la nueva máquina apareciese en 1990, pero las cosas se precipitaron. El 7 de octubre de 1989, se presentó oficialmente SuperGrafx ante la prensa, no tanto como sucesora real de PC Engine, sino, más bien, como un nuevo concepto de entender el videojuego: trasladar la calidad de las recreativas a los hogares.
¡Una recreativa en casa!
Junto a SuperGrafx, se presentó un periférico de 70x30 centímetros llamado Power Console equipado con volante, palanca aceleradora, joystick, conexión para cuatro pads, teclado numérico y otras virguerías, que se acoplaba a SuperGrafx para recrear la experiencia de juego perfecta. Además del hardware, se habló de títulos como Daimakaimura, Strider, 1941, GalaxyForceII o ForgottenWorlds. También se anunció la futura compatibilidad de software entre PC Engine y SuperGrafx: muchos títulos serían compatibles y las versiones de SGX contarían con mejoras gráficas y ventajas, como opción de dos jugadores simultáneos. A nivel técnico, SGX aportaba cuatro veces más RAM (32K) que su hermana menor, un segundo procesador de vídeo con su propia RAM (que elevaba la vídeo RAM a 128Kb) y un chip controlador para gestionar ambos procesadores. Resumiendo, un ligero plus de potencia, el doble de sprites en pantalla (128, respecto a los 64 de PCE), dos planos de scroll independientes por hardware y más RAM para mejores gráficos y sonidos/voces digitalizados, por ejemplo. Los planes de NEC eran vender 300.000 máquinasq en seis meses (al alto
precio de 39.800 ¥, unos 320 €) y lanzar Power Console en primavera de 1990 (59.800¥). El 30 de noviembre, SuperGrafx salió a la la venta con un soloventa con un solo juego en catálogo, el insulso BattleAce. Mientras, todo Japón seguía hipnotizado por un prodigio portátil llamado Game Boy.
Desastre absoluto
Los más de dos millones de usuarios de PC Engine y las desarrolladoras no captaron el mensaje de NEC/Hudson Soft, pese a ser retrocompatible. El segundo juego exclusivo, Granzort, tardó en aparecer cuatro meses y, aunque NEC Avenue trabajaba en Daimakaimura y los juegos ya mencionados, además de OutRun y Darius, Power Console nunca saldría a la venta por costes de fabricación y las pobres ventas de SGX. Esto paralizó el desarrollo de sus juegos, en favor de las versiones de PCE. Ni la excelsa versión de Daimakaimura ni los coletazos finales de Hudson Soft con Aldynes y 1941 salvaron a esta insólita máquina, a medio camino entre presente y futuro.