FAMICOM: UN MUNDO POR DESCUBRIR
Lo primero que sorprende de la NES japonesa es su diseño, en las antípodas del cajón gris que se distribuyó en Europa. Para ahorrar dinero al máximo en su producción, Nintendo fijó los cables de los pads a la consola (no hay LED de encendido, sólo una pegatina roja bajo la pestaña del ON). Aun así, los usuarios japoneses disfrutaron de un extra que se eliminó de la NES occidental: un micrófono en el pad del segundo jugador, que décadas después inspiró uno de los minijuegos de la saga WarioWare, y que por citar un ejemplo, se utilizaba en el Zelda original para aturdir con sonido a un determinado enemigo. Los cartuchos también son muy diferentes, más pequeños y coloridos. Las cajas, como no, son una auténtica delicia para coleccionistas, tanto las de cartón como las de plástico.
El 20 de febrero de 1986, Nintendo comercializó un complemento sorprendente para su consola (por entonces ya líder del mercado japonés): Famicom Disk System. Esta unidad de disco (que incluso funcionaba con 6 pilas) se desarrolló como una alternativa más económica a los por entonces caros cartuchos. Sus discos de 2”, almacenaban información por ambas caras y permitían grabar partida. Muchos clásicos ( Zelda, Castlevania, Metroid…) nacieron en este formato, para luego ser adaptados a cartucho cuando dieron el salto a Occidente. Desgraciadamente, durante ese proceso, y con intención de ahorrar memoria, se rebajó la calidad del audio. De ahí que las versiones en disco de Castlevania y Metroid se hayan convertido en un tesoro para coleccionistas.
Otro aspecto sorprendente del Famicom Disk System es que era posible utilizar discos vírgenes para grabar juegos, por sólo 500¥, en kioskos especiales (Disk Writer) ubicados por Nintendo en tiendas.
Si decides adquirir una Famicom y la unidad FDS hay dos detalles a tener en cuenta. La Famicom original sólo cuenta con salida de antena, y es imposible de sintonizar en las TV europeas. Es necesario modificarla para incorporar una salida de AV, o bien puedes comprar la AV Famicom, que lanzó Nintendo en 1993. La goma de la disquetera de la FDS se rompía con bastante facilidad, así que ojo con los chollos de eBay.
DISK WRITER. En estos kioskos se podían grabar juegos en discos vírgenes por 500¥, frente a los 5.000¥ del cartucho. Estuvieron operativos hasta 1993.