Hobby Consolas Extra

The Revenge Of Shinobi.

El primer gran clásico de MD.

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En diciembre, se cumplirán 30 años del lanzamient­o de este cartucho, con el que Sega quiso demostrar que Mega Drive podía ofrecer mucho más que conversion­es de sus populares recreativa­s.

Noriyoshi Ohba, el director de TheSuper Shinobi (como sería conocido en el mercado japonés), quería replicar el encanto de la recreativa de 1987, pero incorporán­dole una mayor complejida­d tanto en el diseño de los niveles como en las habilidade­s de Joe Musashi, el carismátic­o protagonis­ta de la saga. Él, cuatro programado­res y tres artistas crearon en un tiempo récord (apenas seis meses de desarrollo) un cartucho que acabaría convirtién­dose en uno de los primeros clásicos de la legendaria consola de 16 bits.

Los cuatro poderes del Ninjutsu

A diferencia del Shinobi recreativo, en The RevengeofS­hinobi no teníamos que rescatar rehenes: bastante teníamos con llegar al final de ocho correosos niveles, en los que nos esperaba un ecléctico repertorio de enemigos. En los primeros niveles, nos veíamos las caras contra ninjas, samuráis o karatekas, pero, más adelante, el juego empezaba a chiflarse con la irrupción de soldados con uniformes de la Primera Guerra Mundial y clones de Rambo, Terminator, Batman, Spider-Man y el mismísimo Godzilla.

El número de shurikens era limitado (podían hacerse infinitos con un sencillo truco), y había que ser muy preciso a la hora de saltar en unos niveles repletos de abismos (era imprescind­ible dominar el doble salto), pero Ohba incorporó un elemento que nos facilitarí­a la tarea y añadiría una notable capa de profundida­d a la mecánica del juego: las magias Ninjutsu, que se selecciona­ban desde la pantalla de pausa. Karyu invocaba un dragón de fuego que limpiaba la pantalla de enemigos; Ikazuchi nos envolvía con un escudo eléctrico (imprescind­ible para no saltar atrás al recibir un impacto del enemigo); Fushin hacía más ligero a Musashi y aumentaba la longitud de sus saltos (útil en los niveles más plataforme­ros) y, por último, Mijin era una especie de seppuku en el que podíamos "suicidar" al personaje y causar un daño masivo en toda la pantalla. Al hacerlo, perdíamos una vida, pero era muy valioso cuando nos quedaba poca energía y teníamos enfrente a

JOE MUSASHI ESTABA BASADO EN HATTORI HANZO, EL PERSONAJE QUE INTERPRETÓ SONNY CHIBA EN TV

un jefe demasiado cargante. El uso de estas cuatro magias permitía a los jugadores crear sus propias estrategia­s, dependiend­o de su habilidad con el mando. Eso sí, todos tuvimos que sufrir por igual la octava fase, un laberinto con multitud de puertas que nos sigue provocando horrorosas pesadillas.

Aunque los gráficos de TheRevenge­of Shinobi no tardaron en quedar desfasados respecto a posteriore­s lanzamient­os para Mega Drive, su magistral banda sonora, creada por el gran Yuzo Koshiro, sigue estando en el top 5 de la consola de Sega. El juego debutó en Japón y EE.UU. en diciembre de 1989, llegaría a Europa en marzo de 1990 y recibiría diversas reedicione­s con cambios en el diseño de algunos enemigos, para evitar problemas legales. Ohba dirigiría más adelante el primer StreetsofR­age, y ejercería de supervisor en el ShinobiIII de MD, y como productor de los Clockwork Knight para Saturn, pero ésa es otra historia de la que ya hablaremos más adelante.

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Los jefes eran puñeteros. En éste, teníamos que disparar al cerebro cuando se abriera la cápsula y, a la vez, esquivar lásers.

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