Cars 3: Hacia la victoria
Al viejo rayo aún le quedan veloces fogonazos
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Cada vez se lleva menos lo de los juegos que acompañen el estreno de una película, pero no es el caso de "Cars 3". Tras el cese de Disneyinfinity, Avalanche Software ha recibido el encargo de hacer un arcade de velocidad inspirado en el filme de Pixar, y ha cumplido.
No compite en la liga de Mariokart 8 o Sonic&all-starsracingtransformed, pero Hacialavictoria es un juego de carreras muy competente, especialmente para los más pequeños. No se siguen a pies juntillas los acontecimientos de la película, pero sí que se han volcado todos sus personajes e, incluso, se han añadido las mismas voces de la versión española, que escuchamos tanto en plena carrera como en esporádicas secuencias de vídeo, en las que el infame Chick Hicks trata de menospreciar a Rayo McQueen. El objetivo último es derrotar a Jackson Storm, el "malo" de la película, de forma que debemos ir desbloqueando los diferentes modos, las veintidós localizaciones o los veintitrés corredores. No sólo importa ganar eventos, en los que podemos obtener hasta tres estrellas, sino que hay 136 retos que podemos cumplir en cualquier prueba y que invitan a conducir de forma diferente: encadenando piruetas, disparando hacia atrás, arrastrando barriles...
Todo sea por los acelerones
Cars3 es un arcade que va al grano, con un control tan sencillo como divertido. Casi no hace falta frenar en las curvas, pero hay que gestionar la recarga del turbo, que tiene cuatro fases. Para ello, hay que aprovechar tres tipos de alfombras, que obligan a derrapar, ir marcha atrás o ponerse a dos ruedas. Si las completamos al 100% de la forma adecuada, recibimos un acelerón extra. Además, podemos saltar, hacer piruetas en el aire y golpear lateralmente a los rivales, lo que también da potencia.
Entre los veintitrés coches, no sólo hay modelos de competición como Rayo Mcqueen o Jackson Storm, sino también rarezas como la grúa Mate, el tráiler Mack, el autobús Fritter o el "Mini" Guido. No hay grandes diferencias
RADIADOR SPRINGS AGUARDA en este Competente ARCADE A quien no haya Tenido Suficiente Con la Película