Aven Colony
El Espacio, la última frontera
Simcity o Cityskylines nos han invitado a erigir ciudades controlando y decidiendo hasta el último de sus aspectos. Ahora, ese mismo planteamiento nos lleva al espacio, donde debemos colonizar un planeta y expandir las bases, creando todo lo que los colonos necesiten.
No sólo se trata de generar los recursos (cultivos, electricidad, agua, oxígeno...) y levantar edificios o investigar tecnología. El objetivo es crear una "sociedad espacial", con unos individuos "felices" y ocupados, por lo que es importante controlar aspectos como su moral o la criminalidad, evitando, además, los peligros (desde tormentas de esporas que harán enfermar a los colonos a enormes gusanos de arena que destruirán nuestras urbes) y aprendiendo a aprovechar las características del planeta, como unos largos días y noches que son estaciones en sí mismas, con lo que ello conlleva.
Una colonia para cualquiera
Quizá, uno de los grandes aciertos de Aven Colony, aparte de su interfaz bien adaptado a consola, es que no "atosiga" con objetivos inmediatos, sino que juega más "a largo plazo", dejando al jugador que explore y avance a su ritmo, sin límites de tiempo o retos que coarten la forma en que quiere progresar, aunque las misiones de la campaña —gracias a la cual conoceremos más datos del pasado del planeta— nos van guiando para que aprendamos a gestionar y controlar los menús. Un desarrollo entretenido, que gustará a los fans de la simulación que busquen algo distinto a los típicos simuladores de ciudad, gracias al contexto espacial y a las marcianas situaciones que aguardan.