Opinión
Tan difícil como hermoso, Toki entusiasmará a los que disfrutaron del arcade original, sobre todo si adquieren la edición física, que incluye un soporte con forma de recreativa. Ojalá se animen a resucitar el no menos mítico Cabal de TAD. Toki es un verdadero espectáculo gráfico y sonoro, pero también es terriblemente corto. Evita la tentación de poner la dificultad en "fácil" o llegarás al final antes de lo que imaginas. Es el único punto débil de un port colosal que llega al mercado tanto en formato físico como en digital. Entre ambos hay poca diferencia de precio, así que mejor decantarse por la edición física, bautizada como Retrocollector Edition, que, además del juego, incluye un cómic, pegatinas, dos litografías y un soporte de madera para Switch con forma de recreativa. De esa manera, aunque te acabes el juego tarde o temprano, podrás lucir con orgullo un altar en el que rendir homenaje al simio de TAD Corporation. Lástima que no hayan emulado la recreativa original a modo de extra.