Suda51: El genio que transpira locura y violencia
fue enterrador en su juventud y ahora es un gurú del videojuego: no existe nadie como goichi suda en este mundo
Hace unos días, se puso a la venta Travis Strikesagain:nomoreheroes, un juego que llevaba anunciado para Switch desde hace dos años, concretamente desde el día en que Nintendo presentó en sociedad la consola. El juego ha cumplido con creces y, para celebrarlo, vamos a repasar la trayectoria de su creador, el estrambótico Goichi Suda, alias Suda51, un apodo que juega con la pronunciación de los números 5 y 1 en lengua japonesa ("go"+"ichi"), en la que, además, es habitual invertir el orden de nombre y apellidos.
Todo lo que se diga de este genio es poco. Es verdad que sus títulos suelen tener irregularidades y distan de ser obras maestras, pero tienen tanta personalidad que muchos los consideran juegos de culto, y en Hobby Consolas somos defensores a ultranza de su estrambótica filosofía. A un tipo que dice que los videojuegos no sólo son arte, sino que son la forma más elevada de arte, hay que quererlo.
Suda es un "personajazo" con todas letras. Se aleja por completo del prototipo de creador japonés, pero, lejos de ser un bufón, es capaz de mantener un indescriptible equilibrio entre seriedad e hilaridad. Por ejemplo, cuando tiene que mantener el rictus serio, a la hora de hablar en público o en una entrevista, lo hace. Sin embargo, no tiene reparo en hacer el tonto cuando le sacan fotos, ya sea haciendo carantoñas o simulando disparar con los dedos de la mano, uno de sus gestos más recurrentes.
Su forma de ver el protocolo es muy sui géneris. Basta con recordar los eventos de presentación de Nomoreheroes, en los que se le entrevistaba mientras estaba sentado en un váter (según dice, el escusado es para él una inmensa fuente de inspiración) y había decoración en forma de rollos de papel higiénico con el logo del juego. Antes de eso, durante la promoción de Killer7, solía aparecer ataviado con una máscara de lucha mexicana. Muy
recordada es también su actuación en la presentación mundial de Switch, en la que, en lugar de leer lo que le indicaba el teleprompter, decidió improvisar... y desquiciar a la persona encargada de traducir sus palabras al inglés. Pero nuestra anécdota preferida es que, cuando salió a la venta el primer juego en el que trabajó, decidió pasar ese día en diversas tiendas, viendo si la gente se interesaba por él, con ganas de susurrar que lo compraran a quienes lo ojeaban y de abrazar a los que daban el paso.
La muerte es sólo el comienz o
Los comienzos laborales de Suda51 son, como poco, chocantes. A principios de los 90, trabajaba en una funeraria, preparando flores... y como enterrador, un empleo que, como es lógico, no era de su agrado. Sin embargo, era un entusiasta de otro ámbito donde también se movía otro Enterrador, éste con mayúscula: el de la lucha libre. La fortuna quiso que Human
Entertainment reclutara gente para su saga Superfireprowrestling. Suda estaba convencido de que, con sus conocimientos del mundillo, podía ganarse un puesto, y así sucedió.
El joven Goichi se unió a la compañía en 1993 y, durante el siguiente lustro, contribuyó activamente al desarrollo de la citada serie y al de Twilightsyndrome, una saga de terror adolescente. En 1998, antes de que la empresa se declarara en bancarrota, decidió marcharse para fundar su propio estudio, Grasshopper Manufacture, que debe su nombre a la canción "Grasshopper", de la banda británica Ride, que se hartó a escuchar hasta altas horas de la noche durante el desarrollo de Superfireprowrestling3:finalbout. En los años sucesivos, trabajó incansablemente, como director, guionista, diseñador o productor en juegos como Thesilvercase y Flower,sunandrain. Sin embargo, hablamos de una época en que infinidad de juegos japoneses jamás emigraban a Occidente, y eso hizo que no supiéramos de él por estos lares hasta 2005.
Adaptación progresiva al extranjero
Fue entonces cuando se lanzó Killer7, un juego hecho en colaboración con Capcom y con el mismísimo Shinji Mikami. Algunos de los juegos posteriores de Grasshopper siguieron siendo exclusivos del mercado japonés, pero los más importantes ya nunca dejaron de lle- garnos. Killer7 fue un punto de inflexión también en la propia filosofía del estudio, que empezó a desarrollar sagas que potencialmente fueran del gusto occidental. En realidad, es algo que tardó incluso demasiado en suceder, pues Suda es un gran fan de la cultura pop occidental y hasta afirma que su juego favorito es Anotherworld y que su creador, el francés Éric Chahi, fue para él un gran referente.
El caso es que, a partir de entonces, la mayoría de creaciones de Suda51 llegaron a Occidente y él se volvió una figura mediática, tanto como para llegar a colaborar con Hideo Kojima en un serial de radio de Snatcher o con Akira Yamaoka, compositor de Silenthill. Y no sólo eso: Grasshopper puede presumir de haber trabajado con editoras occidentales de la talla de Electronic Arts ( Shadowsofthe Damned), Warner Bros ( Lollipopchainsaw) o Deep Silver ( Killerisdead), amén de con japonesas como Capcom ( Killer7), Nintendo ( Nomoreheroes), Bandai Namco ( Ranko Tsukigime'slongestday) o Koei Tecmo ( Projectzero:maskofthelunareclipse), lo que da cuenta del interés que hay en su trabajo.
Violencia desenfrenada y sangrienta
En esta generación, se ha prodigado menos de lo que nos habría gustado, con los únicos lanzamientos específicos de Letitdie, Travis Strikesagain (un free-to-play y un spin-off
que no equivale a Nomoreheroes3) y el remake de Thesilvercase, pero confiamos en que Suda vuelva a apretar el acelerador con nuevas propuestas que den continuidad a unas señas de identidad muy definidas, especialmente en las que son sus cinco grandes IP: Killer7, Nomoreheroes, Shadowsofthedamned, Lollipopchainsaw y Killerisdead.
Por encima de todo, hablamos de juegos en los que la violencia y el gore cobran una dimensión estética, mediante litros de sangre y el uso de armas tan disparatadas como afiladas, como una espada láser o una sierra mecánica. Normalmente, eso implica abrazar el género del hack and slash, pero también ha habido enfoques de shooter. Además, muchos de los protagonistas son asesinos, ya sean otakus, agentes secretos o hasta colegialas. De hecho, en Nomoreheroes, había hasta un ranking de matones por el que ascender.
Hay que destacar también la presencia habitual de minijuegos dentro de los propios juegos. Travisstrikesagain es ese concepto llevado a su cénit, pero antes ya lo vimos con el shooter que había dentro de Nomoreheroes2 o las secciones 2D de Shadowsofthedamned.
En sus inicios, Suda estaba muy apegado al survival horror, y eso se sigue percibiendo hoy en día... pero eclipsado por un humor absurdo y un tono de serie B muy bien llevados. En ese sentido, son muy habituales las rupturas
de la cuarta pared, en las que los personajes se comunican directamente con el jugador. Pero, por encima de todo, Suda es un apasionado del cine y de las series de televisión, especialmente del anime, y eso se traduce en la presencia de incontables referencias, algunas muy evidentes y otras más sutiles. Por ejemplo, sólo en Nomoreheroes, hay alusiones a "Batallas sin honor ni humanidad" (la presencia de yakuzas), a "Memento" (el motel), a "La loca historia de las galaxias" (la katana láser)... Incluso hay referencias a actores, como se observa en Sylvia Christel (su nombre está sacado de la película erótica "Emmanuelle"), cuya apariencia se inspiró en Scarlett Johansson o Keira Knightley. Hasta se parodian los nombres de directores como Steven Spielberg y Takashi Miike. Y, hablando de cineastas, para Lollipopchainsaw, Suda contó con la colaboración en el guión de James Gunn, responsable del libreto de "Guardianes de la Galaxia", y el homenaje a George A. Romero era más que evidente.
Quizá por su pasado de sepulturero, la muerte es un tema muy recurrente en los juegos de Suda51, y la explora de muy diferentes maneras, especialmente en forma de resurrecciones y encarnaciones. Ahí están los zombis de Lollipopchainsaw o nuestro compañero en Shadowsofthedamned, Johnson, que era una calavera parlante. Y no falta el
surrealismo, quién sabe si por ser fan de Franz Kafka. Un ejemplo paradigmático estaba ya de forma sorprendente en uno de sus primeros juegos de lucha libre, donde el personaje, tras alcanzar la gloria, decidía suicidarse... En Letit Die, el propio epicentro jugable es la idea de la muerte y la reencarnación, sin ir más lejos.
Exuberancia visual y sexual
Los juegos de Suda no se caracterizan por tener el mejor apartado técnico, pero lo compensan con una dirección artística muy característica. El colorido es siempre desbordante, y son habituales el cel shading, los efectos de neón, la sangre o la presencia de onomatopeyas en pantalla. También hay figuras muy recurrentes, como las máscaras de lucha libre mexicana, la omnipresente luna o los tigres.
El erotismo es otra parte esencial de los juegos de Suda, y aquí sí es muy japonés. Siempre hay "femmes fatales" metidas en la ecuación: Juliet, Sylvia, Paula... En Killerisdead, estaba incluso el llamado modo gigoló, en el que Mondo Zappa podía ganarse el favor de distintas mujeres. Igualmente, para la promoción de Lollipop Chainsaw, se contrató a la cosplayer Jessica Nigri, famosa por su generoso busto...
En una industria cada día más timorata, se agradece que haya excentricidades e irreverencias como las de Suda51, un genio al que se le desparrama el talento por todos los poros.