Crash Bandicoot 4: It's About Time

Crash en tamaño De bolsillo

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Tras N.sanetrilogy, Crash apuntaló su regreso con esta entrega completamente nueva para PS4 y Xbox One, que llega ahora a Switch, así como a PS5, Series X-S y PC. El juego estuvo a la altura de la leyenda de Crash, al mantener intactas sus señas de identidad (plataformas, coleccionables y mucho sentido del humor) y mezclarlas con un buen puñado de interesantes novedades. Fue un regreso por la puerta grande que, ahora, presenta en consolas next-gen y PC las habituales mejoras (60 fps, 4K, menores tiempos de carga...). Pero nos vamos a centrar en la versión de Switch, que presenta un mayor desafío.

El multiverso, en cualquier parte

Lo cierto es que esta versión resulta un poco decepcionante: se ralentizan las secuencias de vídeo, aunque, a la hora de jugar, se mantengan los 30 fps estables (menos mal, porque sería un infierno en un juego tan desafiante), y la calidad visual se ha visto notablemente reducida. En modo TV, mantiene el tipo, gracias al bonito apartado artístico, que ayuda a esconder imperfecciones. Sin embargo, al pasar al modo portátil, la cosa empeora. La resolución se reduce aún más, provocando que haya elementos del escenario que no sean más que un borrón. El resultado es un juego que, en lo visual, no da la talla en muchos momentos, si bien la experiencia jugable (igualita a la de PS4 y Xbox One) se mantiene intacta. Y, gracias a lo divertido que resulta, es posible quedarse atrapados en él, reintentando los niveles hasta romper todas las cajas...