NO DEJES DE...
EXTENDER LA VISITA AL LEJANO NORTE. La mayoría de viajeros se quedan en la costa sur, pero la zona septentrional de la isla también ofrece muchos atractivos que visitar. Por ejemplo, el Parque Nacional Jökulsargljúfur, con otras dos soberbias cataratas: Selfoss y Dettifoss. O el lago Myvatn, con su mágico entorno de fenómenos vulcanológicos: el cráter Viti, la cueva de Grjótagjá –de donde brota agua caliente–, las formaciones de lava de Dímmuborgir y las solfataras de azufre de Námafjall Hverir. También hay que parar en el pueblo más famoso del norte, Húsavík, donde se organizan salidas en lanchas neumáticas para ver ballenas jorobadas y azules, el lugar de Europa en el que hay más probabilidades de poder observar a estos grandes cetáceos.