NO DEJES DE...
VISITAR LA CUEVA DE SANTIMAMIÑE. Hace 20.000 años los cromañones pintaron bisontes, osos, caballos y ciervos en esta cavidad de Kortezubi. Para evitar que se deterioren, su acceso está limitado al vestíbulo y al área arqueológica inmediata, pero las pinturas pueden verse reproducidas gracias a un recorrido por su interior con gafas de realidad virtual que se ofrece en la ermita de San Mamés, convertida en centro de interpretación (santimamiñe.com).