TODO SOBRE EL SKIN CYCLING
Crear una rutina de cuidado facial por ciclos de cuatro noches es la propuesta de tratamiento que está arrasando en redes. ¿Es recomendable? ¿Vale para todas las pieles? Descubrimos sus claves.
CICLOS DE 4 NOCHES
Día 1: exfoliante. Día 2: retinol. Día 3: descanso. Día 4: descanso. Esta es la base del skin cycling, que, a diferencia de tantas otras tendencias de belleza de TikTok (algunas directamente peligrosas), tiene sentido, especialmente cuando se usan activos potentes. Creada por la dermatóloga Whitney Bowe –quien acumula millones de visualizaciones–, se basa en cuidar la piel en ciclos de cuatro noches que se repiten.
ALTERNAR ACTIVOS
La primera noche, se realiza una exfoliación. La segunda, se usa retinol. La tercera y la cuarta se dedican a la recuperación y descanso cutáneos, usando una limpiadora suave (como cada noche) y luego un sérum o una loción ligera hidratantes. Según la Dra. Bowe, el uso constante de activos tan potentes como los ácidos o el retinol aporta beneficios, sí, pero, a la vez, alteran y dañan la barrera cutánea, provocando
inflamación.Al usarlos solo de forma puntual, se disfrutan sus ventajas sin irritar la piel. Esta tendencia se encuadra dentro de la rutina progresiva que todos los dermatólogos recomiendan en cuanto al uso tanto de exfoliantes como del retinol: introducirlos de forma progresiva y solo ir aumentando la frecuencia a medida que la piel los va tolerando.
CUESTIÓN DE DOSIS
La relevancia del skin cycling depende mucho de la potencia,
tanto de exfoliantes como del retinol. Cuanto más agresivos sean, más sentido tiene espaciar su uso. Las fórmulas más suaves sí se pueden usar a diario o espaciando más el descanso.
A QUIÉN BENEFICIA
El skin cycling es perfecto para cutis sensibles o para las pieles no acostumbradas a los ácidos o al retinol. En cambio, puede llegar a quedarse algo corto en pieles grasas, con impurezas o muy fotoenvejecidas, una sola vez por semana.