LAURA ESCANES TIRA DE IRONÍA PARA DESMENTIR SU NUEVO AMOR
Olvida las polémicas en una comida con amigas
GIANNI Bella tenía una canción que se titulaba precisamente así, «De amor ya no se muere». Y Laura Escanes pronunció casi exactamente esta frase cuando le preguntaron cómo se encontraba anímicamente, minutos antes de recibir un galardón por su labor como «influencer», en la que era su primera aparición pública tras su separación de Risto Mejide.
«Han sido once días intensos y complicados». «Lo estoy pasando mal». «Todas las parejas del mundo se separan y no pasa nada». «Si ya es complicado en una situación normal, imaginad con toda esta presión mediática». Laura se sinceraba para narrar lo que estaba pasando por su cabeza y su corazón cuando las elucubraciones sobre los motivos que habrían dado al traste con su matrimonio derramaban ríos de tinta y ocupaban horas de televisión. Eso sí, prefirió no «dar explicaciones» acerca de los rumores que la relacionaban con un conocido «youtuber», Míster Jägger, al que se señala como detonante de su ruptura cuando, en mayo, el presentador y publicista descubrió una infidelidad por su parte, aunque, en un principio, la «influencer» había tirado de ironía para hacerlos frente: «De camino a ver mi cuarto novio de esta semana», escribía en su cuenta de Instagram, al tiempo que se conocía que Risto se habría dado de alta en una exclusiva «app» de citas.
«La vida sigue. Nadie se muere por amor y hay que seguir adelante». Así daba la joven por sentenciado el asunto. Por eso, no es de extrañar que la «influencer» aproveche el buen tiempo antes de que llegue el frío del otoño para comer con unas amigas en una terraza y olvidarse del huracán en el que se ha visto inmersa, charlar y pasar un rato agradable de confidencias. Y, por qué no, también de risas y fotos para sus redes con quienes ahora le sirven de refugio.
Vaqueros, camiseta blanca y «blazer» parecía ser la consigna estética de la comida de «solo chicas» con la que Laura Escanes ha intentado olvidar la polémica que rodea últimamente a su vida atribuyéndole parejas cuando aún estaba casada con Risto