AMELIA BONO Y MANUEL MARTOS EL TRIUNFO DEL AMOR
Celebran San Valentín de la mano de VICEROY
El próximo 27 de junio cumplen 15 años de matrimonio, han formado una gran familia unida con sus 4 hijos y siguen tan enamorados como el primer día
«Estamos viviendo un momento fantástico en todos los sentidos. Disfrutando mucho y siendo conscientes de la suerte que tenemos»
«No hay ningún paso que no volvería a dar. Todo en la vida, incluso lo malo, sirve para aprender», dice el ejecutivo de la industria musical
EL próximo 27 de junio celebrarán el 15º aniversario de su boda en uno de los mejores momentos. Juntos han vivido una historia que parece sacada de una película. Un amor que parecía predestinado por la amistad de sus respectivas familias, que se consolidó con la llegada de sus hijos y que ha terminado triunfando. Amelia Bono y Manuel Martos forman una feliz familia numerosa junto a Jorge, de 13 años, Manuel, de 12, Gonzalo, de 9 y Jaime, de 6. Sus cuatro «Dalton» los han mantenido unidos incluso cuando las circunstancias se empeñaron en distanciarlos. Nada fue definitivo salvo que jamás dejaron de quererse. El cariño y el respeto tampoco desaparecieron y, tras un período de reflexión, todo volvió a su lugar, donde siempre había estado, aunque en algún momento lo perdieran de vista. Porque lo suyo siempre ha sido un gran amor, desde aquel día en que Manuel vio a Amelia bajar las escaleras del Chesterfield Café de Madrid y «se paró el mundo, el tiempo... y vi toda mi vida por delante junto a ella». Y el hijo de Raphael y Natalia Figueroa y la hija del expresidente del Congreso José Bono y Ana Rodríguez continúan el camino que iniciaron hace más de tres lustros con la misma ilusión y complicidad mientras posan en ¡HOLA! para celebrar San Valentín con las joyas y relojes de Viceroy.
—Amelia, Manuel, ¿cómo habéis arrancado el nuevo año?
—¡Muy bien! Hemos disfrutado de unas navidades en familia, descansando y disfrutando, y vuelta a la rutina con mucha energía.
—Con lo especial que fue 2022 para vosotros, ¿qué esperáis de este 2023?
—Pues seguir todos bien, con salud, y tratar de pasar el mayor tiempo posible con familia y amigos.
«TODOS HAN SIDO BONITOS» —¿Qué momento estáis viviendo ahora mismo? ¿Cómo estáis viviendo vuestro amor?
—Estamos viviendo un momento fantástico en todos los sentidos. Disfrutando mucho y siendo conscientes de la suerte que tenemos.
—¿Este San Valentín es el más especial para vosotros?
—Todos siempre han sido bonitos y especiales, como también lo será este.
—¿Cómo lo vais a celebrar? ¿Tenéis previsto algo?
—Siempre hacemos algo especial. Aunque sea una cena o, si alguna vez se puede, una escapada.
—¿Quién es el más romántico de los dos y en qué momentos lo demuestra?
—Yo creo que en esto somos los dos muy parecidos. Diría que somos igual de románticos. Creo que, aunque muchas veces no es necesario demostrarlo, un simple gesto de vez en cuando es importante —nos dice Amelia—.
—¿Quién es más de regalar, el más detallista?
—Manuel. Lo último que me ha regalado es un viaje y un anillo muy especial con mucho significado.
—¿Y tienes una joya en tu joyero que guardes como un tesoro o que uses en ocasiones especiales?
—Sí. El anillo que me regaló Manu de pedida, y otro que me regaló cuando nació Jaime con los nombres de mis cuatro hijos grabados.
—¿Sigue siendo tu marido uno de esos caballeros a la antigua usanza, te sigue regalando flores, etc…?
Sí, nunca faltan sus 12 rosas rojas en San Valentín y en nuestros aniversarios.
—¿Qué destacarías de él? ¿Qué es lo que te enamora de Manuel?
—Es una persona maravillosa y buena, que me entiende y me guía como nadie. Muy sensato y divertido. Me da siempre los mejores consejos y sobre todo mucha paz.
—Y tú, Manuel, ¿qué admiras de tu mujer?
—Tiene un corazón gigantesco. Es una persona maravillosa. Y es divertida, impredecible, enérgica, noble… Sabe sacar lo mejor de mí y hace que mi vida tenga sentido.
UNA CANCIÓN —¿Qué viste en Amelia para decidirte a conquistarla y qué te ha demostrado con el paso del tiempo?
—Todo… Fue un flechazo. Creo que no hay nada mejor, además de querer a tu pareja, que poder disfrutar y divertirte con ella. Es mi compañera de vida.
—Como dice Manu, fue amor a primera vista. Los dos lo tuvimos muy claro. Manu me ha demostrado tantas cosas, que no sería yo sin él a mi lado —añade Amelia—.
—Si una canción resumiera lo que vives con Amelia y lo que es para ti, ¿cuál sería?
—«You are the sunshine of my heart», de Stevie Wonder. Fue la canción que bailamos en nuestra boda.
—¿Cómo es vuestro día a día como familia numerosa?
—Es una maravillosa locura. No entenderíamos nuestras vidas si no fuera así. Hay mucha organización, que es necesaria, pero mucha diversión y muchas risas continuas. ¡¡¡Es imposible aburrirse!!!
—¿Los planes de familia son los que más disfrutáis?
—Sin duda. Nos encanta salir todos a comer o cenar, hacer deporte, ir al cine, viajar…
«¿El balance de estos quince años? Tenemos cuatro hijos maravillosos y salud. No podemos pedir más», señala la empresaria e «influencer»
—¿Y conseguís «rascar» tiempo para vosotros? ¿Soléis salir mucho o sois más caseros?
—Sí, conseguimos rascar tiempo para nosotros. Ya sea yendo a tomar un vino o picar algo fuera, o en casa, en la cocina después de cenar, nos quedamos un rato charlando antes de acostar a los chicos. Aunque sean minutos, se disfrutan mucho y son importantes.
—Estarán ya muy grandes vuestros hijos… ¿Quién se parece más a uno u otro?
—Enormes… El tiempo pasa demasiado rápido… Todos se parecen mucho a Amelia, pero Manu es el que más se parece a mí.
—Amelia, ¿con cuatro hijos te da tiempo a todo?
—Sí, es cuestión de organizarse bien. Trato de poder dejar todo hecho a nivel trabajo en las horas de colegio de los chicos para después poder dedicarles todo el tiempo posible, aunque a veces sea complicado.
—¿Su educación es vuestro mayor motivo de discusión o estáis prácticamente de acuerdo en todo?
—Por suerte estamos de acuerdo en casi todo. Nos parecemos mucho en eso y siempre hemos estado muy en línea respecto a los niños. Y si no estamos de acuerdo en algo de primeras, charlamos y consensuamos.
—¿Sobre qué valores y pilares basáis vuestra relación?
—Respeto, amor, cariño, tolerancia, admiración…
—¿Creéis que el amor puede con todo?
—Sin duda.
—¿Cual es la mejor manera de que una relación funcione?
—Amor, respeto y diálogo.
—¿Se tienen que perdonar muchas cosas?
—Siempre.
—¿Qué es lo más complicado del día a día?
—No dejar que la rutina te queme.
—Parecéis diferentes y dicen que los polos opuestos se atraen. ¿En vuestro caso el dicho se cumple a rajatabla?
—Lo más notable es que Amelia es muy enérgica e impulsiva y yo soy tranquilo y reflexivo. ¡Pero en lo demás somos muy parecidos!
—Celebraréis además este verano vuestro 15º aniversario de boda. ¿Después de todo lo que habéis vivido a lo largo de estos años,
«En Amelia vi todo… fue un flechazo. Creo que no hay nada mejor además de querer a tu pareja que poder disfrutar y divertirte con ella. Es mi compañera de vida»
«Manuel es una persona maravillosa y buena, que me entiende y me guía como nadie. Muy sensato y divertido. Me da siempre los mejores consejos y sobre todo mucha paz»
seguís creyendo en el amor para toda la vida?
—Por supuesto.
—¿Cuál es el recuerdo más emocionante que guardas del día de tu boda?
—Cuando vi a Amelia entrar en la iglesia.
—15 años es un número muy redondo. ¿Habéis pensado en renovar vuestros votos, en volver a casaros?
—No, no es una idea que nos llame la atención. Pero haremos algo especial seguro.
—¿En todos estos años ha cambiado la percepción que tenéis el uno del otro?
—Yo creo que los años hacen que el respeto, la admiración y el cariño entre los dos crezcan más y más.
—De estos años juntos ¿Cuál es el balance?
—Tenemos cuatro hijos maravillosos y salud. No podemos pedir más.
—¿Qué habéis descubierto de vosotros, para bien o para mal?
«¿La mejor manera de que una relación funcione? Amor, respeto y diálogo. Creemos que el amor puede con todo, sin duda»
«Por suerte estamos de acuerdo en casi todo. Siempre hemos estado muy en línea respecto a los niños. Y si no estamos de acuerdo en algo de primeras, charlamos y consensuamos»
«Nuestro día a día como familia numerosa es una maravillosa locura. No entenderíamos nuestras vidas si no fuera así. Hay mucha organización, que es necesaria, pero mucha diversión y muchas risas continuas. ¡Es imposible aburrirse!»
—Que siempre nos tendremos el uno al otro. Pero esto ya lo sabíamos desde el principio.
—Cuando estáis separados, ¿qué es lo que echáis de menos el uno del otro?
—Las risas.
—¿Y qué os gusta hacer cuando os reencontráis?
—Salir a picar algo, tomar un vino y charlar.
—Amelia, cuando miras hacia atrás, ¿estás satisfecha con lo que has conseguido?
—Sin duda. No me puedo quejar de nada. Tengo mucha suerte en la vida.
—¿Qué es lo que más atesoras en tu vida?
—Mi familia.
—Y tú, Manuel, ¿hay algún paso que no volverías a dar?
—Ninguno. Todo en la vida, incluso lo malo, sirve para aprender.
UN MOMENTO MARAVILLOSO Y PLENO —¿Cómo miráis al futuro y que esperáis que os pueda traer?
—Que nuestros hijos sigan creciendo felices y que podamos ser testigos y disfrutarlos durante mucho tiempo.
—Amelia, Manuel siempre es muy discreto, tú tienes muchos miles de seguidores. ¿Cómo lleva tu exposición en ese sentido?
—Lo lleva muy bien. Manuel ha estado expuesto desde pequeño, tanto por su familia como después por su profesión, así que lo lleva con total normalidad.
—¿Alguna vez te ha pedido que no muestres tanto en redes?
—No. Nos entendemos muy bien y los dos sabemos donde está nuestro límite.
—Eres una mujer muy inquieta, te gusta hacer muchas cosas. ¿Qué es lo próximo con lo que nos vas a sorprender?
—(Ríe) No lo sé. Me gusta probar cosas nuevas. A nivel profesional tengo proyectos muy interesantes.
—¿Qué momento vital dirías que estás atravesando?
—Un momento maravilloso y pleno. Soy inmensamente feliz.
—¿En los momentos más difíciles en quién te apoyas?
—En mi familia y amigos.
—¿Llevas la vida que siempre soñaste?
—Mucho más de lo que he podido soñar.
«Manuel es el más detallista de los dos. Nunca faltan sus 12 rosas rojas en San Valentín y en nuestros aniversarios. Lo último que me ha regalado es un viaje y un anillo muy especial con mucho significado»