Hotel Icon Wipton The Captain / Exquisitez que salta de las paredes a la mesa

Situado en el Barrio de Salamanca, en la emblemática calle de Jorge Juan, el conocido hotel Petit Palace Art Gallery se ha transformado en el hotel Icon Wipton de la mano de Proyecto Singular, un espacio muy particular con una estética contemporánea sobre una base clásica donde toman protagonismo las amplias zonas comunes y The Captain, un nuevo restaurante que aúna exquisitez y modernidad tanto en el terciopelo que forra sus sillones como en una propuesta gastronómica diseñada para disfrutar.

Inspirado en los llamados “Captains of Industry”, el estudio de arquitectura e interiorismo responsable del proyecto ha querido hacer con el nuevo Icon Wipton un tributo a los personajes de la historia que hicieron una contribución positiva en el progreso de la humanidad. “Los capitanes de la industria aportaron un valor incalculable mediante la expansión de los mercados y el aumento del comercio, proporcionando más puestos de trabajo y aumentando la productividad. Su determinación y trabajo hizo que fueran un ejemplo para las generaciones posteriores. Es el caso de Henry Ford, Cornelius Vanderbilt o John D. Rockefeller, entre otros”, explican desde Proyecto Singular.

El nuevo hotel cuenta con 61 habitaciones distribuidas en cinco plantas y amplias zonas comunes, donde toma especial protagonismo la recepción y The Captain, un nuevo restaurante con una carta variada en la milla de oro de la restauración de Madrid. Se trata de un proyecto con una estética contemporánea sobre una base clásica. El espacio se caracteriza por sus colores masculinos y la infinidad de detalles que lo convierten en un ambiente íntimo y único, en el que se pretende realizar una experiencia 360º donde el usuario pueda disfrutar tanto de la estancia como de agradables cenas en sus salones.

El interiorismo del restaurante posee múltiples referencias de épocas anteriores, utilizando tapizados con capitoné muy marcado, telas aterciopeladas y diseños estampados con motivos clásicos y refinados que se combinan en perfecto equilibrio con lámparas que recuerdan ligeramente al art déco del Madrid de los años 20. En el techo se puede descubrir un artesonado de madera reticular que integra la iluminación y el sonido, y además cubre una superficie acústica para un buen confort acústico. Aprovechando la morfología de la planta, se integran unas zonas de sentado favoreciendo la aparición de rincones más íntimos.

Este diseño colonial renovado se extiende como el agua a la propuesta gastronómica de The Captain, saltando de las paredes a la mesa para crear una carta diseñada para disfrutar. Así, The Captain presenta en su menú productos diarios de la gastronomía mediterránea cocinados en elaboraciones nada clásicas, rezando en su carta dos lemas que resumen a la perfección su filosofía: ‘Only for gourmands’ y ‘All access club’. Para abrir boca, la sardina ahumada con chutney de remolacha será la favorita de los adictos a los sabores intensos y con personalidad. El clásico sándwich inglés reaparece con variantes innovadoras como el pollo cocinado a baja temperatura con curry y chutney de mango o el codillo asado con queso suizo. En homenaje al clásico guiso inglés, destaca el estofado de carrillera de ternera a la Guiness con un toque asiático, puré de patata thai. Y para acabar con buen sabor de boca, The Captain propone el ‘Pumkinpiecremebrulee’, un híbrido de dos clásicos de la repostería francesa y americana. Para los más aventureros, un helado de pan, bacon y bourbon con sopa de natillas.

Una extensa comida, un tentempié o incluso un buen cóctel a media tarde... The Captain promete no defraudar las exigencias del público madrileño, acostumbrado a que el diseño y la originalidad no estén reñidos con el día a día de la capital.