Los paros en Renfe no alteran la cotidianidad del puente de agosto por el bajo seguimiento
La huelga de ayer en Renfe, día de mayor tránsito de viajeros del verano por el puente festivo de agosto, no provocó alteración alguna en las estaciones españolas y tuvo un seguimiento escaso por los trabajadores en el primer turno de paros.
Tanto Renfe como el sindicato convocante, la Confederación General del Trabajo (CGT), coincidieron en hacer un diagnóstico de absoluta normalidad en las estaciones, con inapreciables retrasos o perjuicios para los viajeros en la segunda de las cuatro jornadas de huelga convocadas por este sindicato para el verano.
El panorama en la estación de Atocha de Madrid, una de las que soporta mayor movimiento de pasajeros, fue de absoluta normalidad para la víspera de la festividad del 15 de agosto.
La mayoría de viajeros señalaron que desconocían que hubiese convocada una jornada de huelga o que sus trenes estuviesen afectados por los paros. “Venimos de Barcelona y hemos llegado bien, ahora vamos a coger otro tren y parece que están todos en tiempo y no hay problema para volver”, apuntó uno de los viajeros que esperaban en la estación madrileña.
Otros pasajeros con trenes cancelados fueron reubicados en los inmediatamente posteriores. “La solución que me han dado es el próximo tren, dentro de 45 minutos”, declaró uno de los viajeros afectados.
El portavoz de CGT del sector ferroviario, José López, aseguró que la total normalidad es producto de los ser vicios mínimos decretados por el Ministerio de Fomento.
El representante sindical dijo que el seguimiento de la huelga fue muy reducido porque “son ser vicios mínimos salvajes que impiden ejercer el derecho a la huelga de los trabajadores”.