Isla Canela SA reabrirá el campo de golf de Costa Esuri
● La reapertura permitirá a Ayamonte duplicar su oferta como destino golfístico ● Los 36 hoyos que posee el complejo aportarán unas 30.000 salidas al año
La empresa Isla Canela SA, que gestiona todo el complejo urbanístico del mismo nombre en Ayamonte –incluido el campo de golf ubicado en el mismo–, ha anunciado que desde este miércoles se ha hecho cargo del campo de golf de Costa Esuri, que cerró sus puertas el pasado mes de mayo por problemas económicos.
En un escueto comunicado, la sociedad anónima señala que “es para nosotros un placer informar que a partir de hoy, día 14 de agosto 2019, la empresa Isla Canela SA se hace cargo de la gestión y explotación del campo de golf de Costa Esuri”, a lo que añade que ha sido un “proceso largo”, en el que el Ayuntamiento de Ayamonte “ha mostrado su compromiso y determinación para resolver la situación del campo de golf, primero con el apoyo decidido del anterior alcalde, Alberto Fernández, y posteriormente por el nuevo equipo de gobierno liderado por la alcaldesa Natalia Santos, a quienes agradecemos públicamente todas las gestiones realizadas”.
La compañía también expresa en este comunicado su “compromiso más absoluto para intentar recuperar un activo tan importante como es un campo de golf,
La compañía agradece la implicación de los alcaldes para resolver la situación
el cual se unirá al ya existente en Isla Canela”.
La gestión de estos 36 hoyos, junto con la planta hotelera de Isla Canela, “permitirá dinamizar el municipio a lo largo de los doce meses del año, aportando riqueza y estabilidad a Ayamonte”, remarca la empresa, a lo que añade que “el reto que tene
mos por delante no va a ser fácil, teniendo en cuenta el actual deterioro del campo de golf, pero nos comprometemos a poner los medios económicos y profesionales para que muy pronto Ayamonte se convierta en un destino de golf de referencia a nivel nacional e internacional”.
La empresa concluye afirmando que “Isla Canela SA, tal como viene haciendo desde hace años, reafirma así su compromiso y vinculación con el municipio de Ayamonte”.
Como adelantó Huelva Información el pasado mes de mayo, el campo golf Costa Esuri Oeste, que reabrió sus instalaciones en octubre de 2014 de la mano de la empresa onubense H2O Integral Ser vices (después de permanecer los seis meses anteriores cerrado por el desahucio de sus anteriores gestores), volvió a echar el cerrojo después de más de una semana sin riego por cuestiones económicas, según informaron entonces fuentes cercana sala instalación ayamontina.
De esta forma, la instalación golfística fronteriza del norte del municipio cerró sus puertas en la jornada del 18 de mayo, lo cual fue considerado por todos como una “mala noticia”.
En una carta remitida por el capitán de dicho campo de golf a los socios del club de golf Costa Esuri, se señaló que las razones del cierre pasaban porque los nuevos propietarios “no están dispuestos a pagar la factura pendiente del agua, de aproximadamente 70.000 euros”, y por la existencia de una deuda “de aproximadamente 2,8 millones de euros” con el Ayuntamiento de Ayamonte que “no se sabe quién va a pagar”.
El cierre del campo dejó en la calle a casi una veintena de trabajadores.
Con “mucha preocupación”, pero con “cierta esperanza” de que fuera algo “transitorio”, recibió el sector del golf onubense la noticia del cierre de Golf Costa Esuri Oeste.
Así lo manifestó a Huelva Información también el pasado mes de mayo Kostka Horno, presidente de la Asociación de Campos de Golf de Huelva, para quien el cierre de cualquier instalación turística en la provincia “no es positivo”.
Horno recordó que en el segmento del golf “ya tenemos un precedente”, en referencia al cierre del campo de golf de Matalascañas hace ahora cuatro años, un periodo de tiempo en el que, según precisó, el número de estas instalaciones se ha reducido en Huelva de ocho a seis con la clausura del campo ayamontino.
El representante provincial de los campos de golf también se mostró muy preocupado porque “no es lo mismo cerrar un hotel, al que se da un lavado de cara antes de reabrirlo de nuevo, que un campo de golf, el cual, si no es objeto de un mantenimiento diario se degrada de forma muy acelerada, y en el transcurso de pocas semanas puede quedar prácticamente inutilizable”.
Por otra parte subrayó que un cierre de este tipo “no da buena imagen entre los turoperadores internacionales”, además de indicar que “no es bueno” para el destino Ayamonte, donde de dos campos de golf se va a pasar a uno solo, “perdiendo por una parte el 50% de su actual oferta de golf, y por otra las casi 30.000 salidas que registraba este campo al año, con lo que ello supone en cuanto a pérdida de consumo en restaurantes y pernoctaciones hoteleras”.
Por último, Horno precisó que este cierre también iba a ser perjudicial para la lucha contra la desestacionalización del turismo, ya que la temporada alta del segmento del golf se inicia una vez concluido el verano para prolongarse durante prácticamente todo el invierno.
En este sentido puso de manifiesto que “los únicos hoteles de la costa onubense cuyas puertas permanecen abiertas durante todo el año son los que están directamente vinculados al golf, que es el mejor complemento al turismo de sol y playa”.