La polución en la bahía de Tokio, un temor de cara a los Juegos
Los niveles excesivos de bacterias detectados en la bahía de Tokio vuelven a generar preocupación por su posible impacto en competiciones que se disputarán en esas aguas en los Juegos Olímpicos de 2020, cuando resta menos de un año para el evento.
El problema salió a la luz por primera vez en 2017, y volvió a aflorar durante una competición de paratriatlón disputada el pasado fin de semana en el Odaiba Marine Park de la bahía tokiota, lo que obligó a la organización a cancelar el tramo acuático de este torneo paralímpico disputado como evento de prueba para 2020. El co
Los excesivos niveles de bacterias en sus aguas dificultarían varias competiciones
mité organizador “hará todo lo posible” por resolver el problema y garantizar “que todas las competiciones pueden celebrarse con garantías para los atletas”. Así lo expuso el vicepresidente de dicha institución, Yasushi Yamawaki.
Los organizadores comenzaron a instalar el año pasado barreras submarinas en la bahía para frenar el influjo de aguas residuales en sus aguas, y ante la reaparición de niveles excesivos de bacterias tiene previsto triplicar las capas de protección subacuáticas.
“Estamos confiados en que el problema se podrá resolver con estas medidas”, dijo el director de comunicaciones del Comité Paralímpico, el estadounidense Craig Spencer.