El Congreso rechaza que Marlaska detalle el dispositivo para el G-7
La Diputación Permanente del Congreso rechazó ayer la petición de Bildu y ERC para que el ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, diera cuenta de los controles policiales y militares con motivo de la Cumbre del G-7 celebrada del 24 al 26 de este mes en Biarritz (Francia).
Los partidos que solicitaban esa comparecencia querían sobre todo que el ministro explicara el origen de una supuesta lista negra de 500 personas, en su mayoría vascas, que tendrían prohibida su entrada a territorio francés y de la que han sabido tras las detención del dirigente de Sortu Joseba Álvarez.
La iniciativa para convocar una sesión extraordinaria de la Comisión de Interior contó con 14 votos a favor y 55 en contra, tras un debate en el que algunos grupos, como el PP, calificaron de “surrealista” que el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez haya ofrecido seguridad a la cumbre y a sus “socios”, que querían reventarla.
Durante la cumbre del G-7, que coincidió con la vuelta de vacaciones y la operación Paso del Estrecho, se desplegaron un total de 7.000 efectivos españoles para garantizar la seguridad y el control del tránsito en la frontera hispano-francesa. En el dispositivo participaron 1.878 agentes de la Guardia Civil y 932 de la Policía Nacional y 4.000 ertzainas, además de miembros de la Policía Foral de Navarra.