La Junta prevé la apertura escalonada de bares y hoteles para antes de julio
Si el Gobierno lo permite, planea un verano de viajes nacionales alargado hasta final de septiembre Trabaja en un protocolo de seguridad basado en el aplicado en los hoteles refugio
La Junta de Andalucía tiene un plan para el turismo. Está definido y puesto por escrito, pero su aplicación va a depender, como reconoce Juan Marín, vicepresidente y consejero de Turismo, de lo que decida el Gobierno. Con el mando único en su mano, espotestad del Ejecutivo central los pasos a seguir, y si nos atenemos a lo dicho por varios ministros, como la de Trabajo, Yolanda Díaz, el pronóstico es pesimista: hasta final de año el sector no verá la luz. Pero si, como también se ha sugerido por Sánchez, el desconfinamiento es por comunidades y zonas (lo más probable), entonces sí que será posible ver en el corto plazo la resurrección de bares, restaurantes y hoteles, dada la menor incidencia del virus en la región, con comarcas sin apenas presencia.
El Gobierno andaluz espera, afirma Marín, la delegación de esta responsabilidad: la de la desescalada, en la comunidad autónoma. Y se propone, ya en el corto plazo, empezar la reapertura gradual de los establecimientos, siguiendo, obviamente, estrictos protocolos de seguridad. Se trata, afirma Marín, de amortiguar el golpe “recuperando parte de los clientes internacionales que se habrán perdido”. Marín da por hecho que no vendrán turistas foráneos hasta 2021 y confía en los viajes interiores de andaluces y españoles. Para no perder el verano, Turismo planea abrir en mayo bares y restaurantes (precedidos del comercio de proximidad) y, en ya en junio, los establecimientos hoteleros. ¿Por qué antes los bares? Marín explica que, aunque los hoteles puedan parecer espacios más seguros, dependen más de que se permita al ciudadano una movilidad más amplia, que es la que implican los viajes.
Aunque desde el Gobierno central se va a establecer un protocolo común a toda España para las aperturas, la Junta ya prepara acciones para que todos los establecimientos “tengan un certificado de garantía que les habilite como espacio seguro”, afirma Marín. El protocolo diseñado por el Servicio Andaluz de Salud para los hoteles refugio (los que acogen a trabajadores esenciales) servirá de base: desinfección diaria, sistemas de ventilación que regeneren el aire, proyectos de digitalización para evitar el contacto con superficies, tomas de temperatura, etc. Quizás, lo más novedoso son “inhibidores de rayos ultravioleta que regeneran el aire y eliminan cualquier posibilidad de contagio”. Han sido diseñados por una empresa cordobesa y serán instalados en todos los hoteles y en los restaurantes que lo deseen. Marín también destaca los dispensadores de mascarillas y guantes que se instalarán en bares y hoteles. Para que las empresas puedan adaptarse al nuevo escenario, la Consejería de Turismo prevé inyectar diez millones de euros para financiar estas inversiones, aunque “muchas de ellas están ya hechas en el 90% de los hoteles”, dice Marín.
La reapertura del turismo, si se cumplen las previsiones de la Junta, irá acompañada de un plan de choque que permita sobrevivir al tejido empresarial. Ya que, incluso en un panorama de reactivación en verano, Turismo estima que la caída será de entre el 40% y el 45% respecto a los resultados de 2019. La Junta prepara una línea de créditos con avales, a través de la Sociedad de Garantía Recíproca Garántia, que permita movilizar entre 400 y 500 millones de euros, con una aportación de la Junta de unos 50 millones. Según Marín, todas las empresas turísticas, grandes y pequeñas, se podrán beneficiar de este programa. Además, se aplazarían las liquidaciones de impuestos propios de la Junta “hasta tres meses después” de lo que decida el Gobierno. Entre estos tributos están, por ejemplo, transmisiones patrimoniales, sucesiones y donaciones y actos jurídicos documentados. Marín pide, en este sentido, sensibilidad a los ayuntamientos para que hagan lo propio con el impuesto de bienes inmuebles y las tasas de ocupación de suelo público.