El Supremo autoriza a la Fiscalía a interrogar a tres ministros de Bolsonaro
El presidente brasileño acusa a su ex titular de Justicia de filtrar informes a la prensa
El Tribunal Supremo de Brasil autorizó el martes a la Fiscalía a tomar declaración a tres ministros del Gobierno de Jair Bolsonaro, en el marco del caso que investiga las acusaciones del ex ministro Sergio Moro contra el presidente por una supuesta interferencia en la Policía Federal.
Ese intento de injerencia fue denunciado por Moro durante una rueda de prensa en la que comunicó su renuncia tras alegar “presiones” por parte de Bolsonaro en la Policía Federal, que investiga a dos de los hijos del mandatario. A raíz de dichas declaraciones, la máxima corte del país autorizó, a petición del Ministerio Público Federal, una investigación contra el presidente brasileño, pero también contra el ex juez para comprobar la veracidad de sus acusaciones.
En el marco de esa investigación, la Fiscalía pidió al Supremo tomar declaración a los ministros de la Presidencia, Walter Braga Netto; de Seguridad Institucional, Augusto Heleno, y al titular de la Secretaría de Gobierno, Luiz Eduardo Ramos, entre otros funcionarios del Gobierno y el Parlamento que, según Moro, fueron testigos de esa supuesta presión.
El magistrado Celso de Mello, decano de la Corte Suprema, aceptó la solicitud de la Fiscalía y dio un plazo de 20 días para el cumplimiento de las diligencias, al tiempo que autorizó el acceso a una grabación de una reunión citada por Moro en la que participaron los ministros.
Moro declaró el pasado sábado ante la Justicia que Bolsonaro quería tener el control de la Policía Federal en Río de Janeiro y desde agosto quería sustituir al superintendente del órgano, lo que tuvo lugar el martes.
“Usted tiene 27 superintendencias de la Policía Federal” en el país y “yo quiero apenas la de Río”, declaró Moro el pasado sábado parafraseando al jefe de Estado, según documentos revelados el martes por fuentes judiciales.
En caso de que las acusaciones del antiguo magistrado se comprueben, el caso podría llevar al mandatario a ser sometido a un juicio e incluso al extremo de ser cesado del cargo.
Por su parte, Bolsonaro acusó el martes al ex juez de filtrar informaciones sigilosas a la prensa y calificó de “mentira absoluta” sus acusaciones.
Según el mandatario, Moro entregó a la cadena televisiva Globo, una de las más inf luyentes del país, informes y mensajes sigilosos sobre el Gobierno, lo que, según Bolsonaro, podría configurar un delito federal. “(Moro) es un hombre que tenía fragmentos de informes parciales que yo le pasaba. ¿Entregar a Globo eso? Eso es un delito federal, quizás se incluya en la Ley de Seguridad Nacional”, expresó Bolsonaro a medios locales.