Carta al presidente y al ministro
Por medio de la presente me pongo en contacto con Uds. para comunicarles mi rotunda oposición a la declaración como hábiles de los días 11 a 31 de agosto de 2020 para todas las actuaciones judiciales, a efectos del artículo 183 de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de julio, del Poder Judicial, mediante Real Decreto-ley 16/2020, de 28 de abril, de medidas procesales y organizativas para hacer frente al Covid-19 en el ámbito de la Administración de Justicia. Entendemos que la situación de colapso en la Justicia hace que todos debamos remar en la misma dirección para recuperar el tiempo perdido que han estado inoperativos los Juzgados como consecuencia de la declaración del estado de alarma, si bien para poder superar el colapso que se prevé en la Justicia (rémora que lleva arrastrándose desde antes de la crisis sanitaria) se hace necesario concentrar recursos y, precisamente, si todos los profesionales ajenos a la Administración (letrados, procuradores, peritos e incluso partes) vamos a trabajar desde el día 11 al 31 de agosto, para que la medida tenga plenos efectos, lo lógico es que los funcionarios de la Administración de Justicia no se cojan sus vacaciones en ese periodo. Aunque el derecho al descanso está reconocido expresamente en el art. 40 de la Constitución Española y en concreto, para los funcionarios, en el art. 14 del EBEP, si los funcionarios de la Administración de Justicia se cogen vacaciones entre los días 11 a 31 de agosto, ello frustraría por completo la finalidad de convertir parte del mes de agosto en hábil. El colectivo de
abogados y procuradores, pese a que muchos no estemos conformes con la medida, estaremos a la altura de las circunstancias; no obstante, les pedimos que consideren la propuesta que les realizo, ya que si queremos recuperar en 20 días casi dos meses de inactividad todo el mundo ha de trabajar el mismo mes (que es lo lógico) para que los Juzgados estén al 120%. Otra opción que les propongo es que todos los funcionarios se cojan las vacaciones en agosto para que a partir del mes de septiembre los Juzgados funcionen (al menos) al 100%, ya que es complicado avanzar si por ejemplo el funcionario encargado de un procedimiento se encuentra de vacaciones. Aprovechando lo anterior, como en tiempo de crisis se consigue mejorar determinadas carencias existen
tes, habría que valorar dotar a la Administración de Justicia de más recursos económicos, materiales y humanos, y sobre todo, en este momento, de medios de prevención y seguridad para garantizar la salud de todos los agentes que intervenimos. España es un gran país, y así lo ha demostrado siempre. Entiendo que es momento de luchar y mejorar. Escuchemos también a los colectivos afectados y a la oposición. Muchas veces una primera idea termina siendo mejorada y desarrollada ante la visión que dan otros. Jaime Yélamos