Juan Marín da ahora la fecha del 10 de junio para abrir las playas
El vicepresidente también cree que el 25 de mayo se podrá viajar entre provincias en Andalucía, aunque eso sólo llegaría en la fase 3
El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, no tiene el mando único, pero aventura fechas. En una conferencia con la Confederación de Empresarios de Cádiz, el también consejero de Turismo aseguró que confía en que las playas puedan abrirse al baño “a partir del 8 o 10 de junio”. Hasta este momento, el Gobierno andaluz apostaba por el 25 de mayo, pero esta decisión no es autonómica, y el plan de desescalada fija para la tercera fase estos baños. Para las provincias mejor situadas, la tercera puede llegar la segunda semana de junio.
Marín también les indicó a los empresarios que en Andalucía podrán realizarse viajes interprovinciales a partir del 25 de mayo. El plan de desescalada sólo los contempla en la tercera fase, en junio, de no ser que el Gobierno andaluz consiga esta excepción del Ministerio de Sanidad.
“Los ayuntamientos del litoral deben plantear sus planes de playa para poder abrirlas a partir del 8 o del 10 de junio”, manifestó el vicepresidente de la Junta ayer en Cádiz. También anunció una línea de ayudas para que los municipios costeros andaluces puedan implantar equipamientos de seguridad con objeto de impedir la propagación el virus SARSCoV-2. Esta nueva fecha –entre el 8 y 10 de junio– supone un retraso de un par de semanas respecto a las previsiones iniciales, ya que el Gobierno andaluz había expresado su intención de que las aperturas de las playas fueran autorizadas en torno al 25 de mayo, con el comienzo de la fase 2 de la desescalada.
Marín recordó además que los estudios realizados por el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han descartado que el agua del mar actúe como agente transmisor del coronavirus y que el tratamiento de las arenas y las altas temperaturas pueden frenar su propagación. No obstante, Marín incidió en la necesidad de mantener las medidas de distanciamiento social.
La Junta ha puesto en marcha ayudas por un valor de 10,5 millones de euros que estarán a disposición de los 61 municipios costeros de Andalucía con el fin de preparar el despliegue de elementos de seguridad y que las playas “cumplan los requisitos que marca la Organización Mundial de la Salud”.
Además, va a desarrollar una aplicación digital con la que “cualquier ciudadano podrá comprobar antes de desplazarse a una playa si está autorizado el baño o si el aforo está limitado”.
En todo caso, la Junta confía en que Sanidad autorice la movilidad interprovincial el 25 de mayo. Según Marín, este paso supondría la reactivación del turismo por lo que ha recomendado a los empresarios del sector que estén listos para reanudar la actividad. “Si pasamos a la fase 2, tenéis que tener vuestras empresas y negocios preparados”, apuntó el número dos del Ejecutivo andaluz.
Marín se mostró confiado en que el turismo nacional permita recuperar al menos el 30% o el 40% de la actividad turística en los meses de verano. Además, criticó la decisión del Gobierno central de decretar una cuarentena forzosa de 14 días para todo viajero procedente del extranjero. En su opinión, se pueden adoptar fórmulas menos drásticas como la habilitación de un documento que certifique que el viajero no está infectado, realizando un test unos cinco o seis días antes del viaje.
“Es algo que ya se está haciendo en países como Finlandia o Noruega. No se puede cerrar el espacio aéreo a los turistas que vienen a un destino seguro como Andalucía, donde hoy hay menos ingresados por coronavirus que por cáncer”, resaltó el vicepresidente de la Junta. “Si España es capaz de llegar a acuerdos bilaterales con otros países para no confinar a sus turistas, podríamos recuperar una parte del turismo internacional”, dijo Marín.
El Gobierno andaluz ha criticado que el alto coste del certificado de seguridad lanzado por la Administración central a través del Instituto de Calidad Turística (ICTE).
Como alternativa, la Junta ha lanzado un certificado propio gratuito en el que apunta pautas a seguir para los negocios. En cuanto al otoño, Marín optó por ser realista y dio por seguro que habrá un repunte de la infección a partir de octubre, aunque confía en que los avances en medicación frenen su escalada.
Es el plan de desescalada del Gobierno central el que fija las fechas