La eterna juventud de Vera Wang
Con 70 años, la alabada diseñadora neoyorquina se ha convertido en una ‘influencer’ que presume de lozanía y tipazo
La ex editora de Vogue se divorció en 2012 de Arthur Becker, padre de sus dos hijas, tras 23 años juntos
Podía haber sido una estrella del patinaje artístico sobre hielo, pero al ser descartada para el equipo olímpico de Estados Unidos decidió dar un giro radical a su vida y se concentró en el mundo de la moda. Vera Wang se pone los patines de vez en cuando, tal y como desvelan sus redes sociales, pero lo más llamativo no es que esa espinita siga prendida en su interior, sino que deslizándose en oa pista de patinaje esta personalidad de 70 años se asemeje a aquella adolescente que soñaba con triunfar en el deporte.
La veterana estilista, diseñadora de cabecera de algunas de las mujeres más influyentes del mundo como Michelle Obama, Jennifer Lopez, Sharon Stone o las hermanas Kardashian, tiene perplejos a sus casi tres millones de seguidores en Instagram. Tanto que en los últimos tiempos, la empresaria neoyorquina se ha convertido en toda una influencer, luciendo sus propios estilismos y presumiendo de su magnífico estado físico.
Wang, que siempre ha sido una mujer delgada, luce más esbelta que nunca y deja ver sus interminables piernas, que realza con taconazos de ensueño. Pero, además, ha compartido instantáneas con ropa deportiva en las que se evidencia el trabajo físico al que somete a su cuerpo para parecer casi una cría. El deporte es parte de su vida diaria, que ejerce dentro de sus mansiones o al aire libre. Más de uno de sus adeptos le ha preguntado qué hace para parecer cuarenta años más joven y tener esa piel sin una mínima arruga o imperfección.
Vera sabe sacarle el mejor rendimiento a su excepcional vejez y oculta aquellas zonas del cuerpo que pueden evidenciar el paso de los años como la cara, con el uso de filtros, sus perennes gafas de sol y posados de perfil y alejados del objetivo del móvil. Pese a que disfruta del buen tiempo de su residencia en Los Ángeles,no le gusta broncearse. “Trabaja, duerme, un cóctel de vodka, no mucho sol”, le contestó a una seguidora que le preguntó por sus trucos para tener esos abdominales.
La ex editora de Vogue es una trabajadora incansable, incluso ahora que podría disfrutar de su holgado patrimonio. Su estudio de Nueva York es su refugio, donde pasa horas con sus asistentes preparando cada una de las colecciones y vestidos de novia. Ha sido la artífice de los estilismos nupciales de muchas famosas como Victoria Beckham, Avril Lavigne, Sarah Michelle Gellar, Jennifer Garner, Uma Thurman, Hilary Duff o Holly Hunter.
Desde hace ocho años vive sola y disfruta de sus dos hijas, Cecilia (30) y Josephine (27), fruto de su único matrimonio con Arthur Becker. La emprendedora y el empresario decidieron poner punto final a sus 23 años de matrimonio en el verano de 2012 y sus abogados llegaron a un acuerdo amistoso, en el que se comprometían a seguir cuidando con devoción a sus herederas.