Macron y Merkel quieren acelerar la reconstrucción con medio billón
● Este fondo estaría destinado a las regiones y sectores más afectados por la pandemia
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, se pusieron ayer al frente de la “reconstrucción” europea con la propuesta de crear un fondo de 500.000 millones de euros destinado a las regiones y sectores más afectados por la pandemia.
Desde París y Berlín, y tras mantener una videoconferencia, los dos dirigentes dijeron estar dispuestos a hacer el esfuerzo “colosal” que requiere superar la situación, pero dejaron claro que su acuerdo debe ser sometido a la aprobación del resto de socios.
El fondo completará los distintos esfuerzos nacionales y las medidas decretadas por el Eurogrupo y deberá ser reembolsado “no por los beneficiarios, sino por el conjunto de estados”, recalcó Macron en una presentación a la prensa.
“Un acuerdo entre Francia y Alemania no significa un acuerdo entre los 27 (miembros comunitarios), pero no hay un acuerdo a 27 sin uno previo franco-alemán. Debíamos hacer ese trabajo y lo hemos hecho. Ahora la Comisión, que representa el interés comunitario, deberá hacer su propuesta”, dijo el jefe del Estado galo.
Su proyecto insta a la Comisión Europea a tomar prestado ese dinero del mercado a través de una emisión de deuda y a transferir esa cantidad a las regiones y sectores más castigados por la pandemia, en base a unos criterios que deberá decidir Bruselas.
“Todo tiene que hacerse dentro de las reglas presupuestarias” de la UE, advirtió la canciller, quien agregó que la aplicación de las futuras medidas para combatir las consecuencias de la pandemia podrá requerir una reforma de los Tratados comunitarios.
La reacción de la Comisión fue favorable: la iniciativa de París y Berlín “va en la dirección” del plan de recuperación en el que trabaja el Ejecutivo comunitario y que prevé presentar el día 27, sostuvo en un comunicado su presidenta, Ursula von der Leyen.
La creación de este fondo, no obstante, es sólo uno de los pilares en los que Macron y Merkel apoyan a corto plazo la salida de la crisis. Su visión conjunta incluye un refuerzo de la soberanía sanitaria de la UE mediante reservas estratégicas comunes de productos farmacéuticos y médicos, un aumento de la capacidad de investigación y del desarrollo de vacunas o una metodología armonizada en el tratamiento de los datos.
Macron y Merkel se mostraron igualmente convencidos de la necesidad de incrementar la soberanía económica e industrial de la UE porque “la integración fuerte en el seno del mercado único es garantía de prosperidad”.
El objetivo final de este último punto es determinar “sector por sector” dónde están las debilidades de la UE y adoptar una estrategia europea en cuanto queden claras las dependencias “de un país o un suministrador”.
El pasado día 8, con motivo del 75º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, ambos subrayaron que el compromiso europeo era más imperioso que nunca, y este nuevo llamamiento al resto de socios se produce en un momento en que en Europa se inicia de forma progresiva la desescalada.
“Nuestro deseo es que en esta fase haya una progresión muy coordinada. Habrá una temporada turística en Europa y tendrá lugar con el virus. Haremos lo máximo posible para que todo vaya lo mejor posible tanto para la salud de nuestros compatriotas como para el sector”, apuntó Macron.
En esa voluntad de avanzar conjuntamente se hizo especial hincapié en las medidas referentes al cierre de las fronteras, en vigor hasta el 15 de junio, para los viajeros procedentes de fuera de Europa, y se cuestionaron iniciativas unilaterales como la cuarentena impuesta por España.
Los líderes criticaron las iniciativas unilaterales, como la cuarentena a los viajeros en España