Alemania pospone la decisión sobre los viajes al exterior
El Gobierno alemán retrasó ayer la decisión de retirar la recomendación de no viajar al extranjero, incluida la UE, hasta la semana que viene, por disensiones internas sobre el riesgo que ello puede suponer para la contención de la pandemia.
La advertencia de carácter global, en vigor desde mediados de marzo, expira el próximo 15 de junio y el Ministerio de Exteriores prevé reemplazarla por recomendaciones diferenciadas, que darían vía libre para viajar a todos los estados de la UE y a otros cuatro países del espacio Schengen.
Sin embargo, las críticas de la conservadora Unión Socialcristiana (CSU), el ala bávara de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel y en cuyas manos se encuentra, entre otras, la cartera de Interior, llevaron al Consejo de Ministros a aplazar el esperado debate.
Baviera, gobernada por la
Las disensiones internas por el riesgo de la apertura han motivado el retraso
CSU, es el estado federado en el que se detectó el primer caso de coronavirus en Alemania y uno de los más afectados, una situación que ha llevado al primer ministro, Markus Söder, a reclamar que la luz verde a los viajes no sea una “decisión en solitario” de Exteriores.
Merkel reconoció ayer en una rueda de prensa en Berlín que las recomendaciones de viaje son uno de los ámbitos en los que se precisa una estrecha coordinación entre el Gobierno central y los estados federados. “Tenemos que observar con mucha atención qué ocurre si abrimos las fronteras Schengen”, indicó al término de una teleconferencia con los jefes de Gobierno de las regiones orientales.
En referencia al plan que posibilitará la reanudación de los viajes, la canciller observó que “queda mucho trabajo en común por hacer, pero estamos bien pertrechados, de forma que si en cualquier momento surgen nuevos problemas los podremos solucionar en común”.