MATSA, UNA MINERÍA COMPROMETIDA CON LA LA BIODIVERSIDAD Y LOS ECOSISTEMAS
El 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada dirigida a fomentar la acción ambiental desde todos los ámbitos de la sociedad y que en este 2020 Naciones Unidas ha centrado en la biodiversidad
OBJETIVO ESTRATÉGICO Involucrar tanto a trabajadores como ala sociedad en general en los proyectos ambientales de laempresa
ALGUNAS ACCIONES Realizar el cálculo de la huella hídrica e investigación para optimizarla gestión actual de las aguas
ESTE compromiso ambiental llega también hasta el ámbito industrial, donde empresas como MATSA trabajan cada día en la mejora continua, con políticas basadas en la economía circular y en el cumplimento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La compañía minera opera desde sus inicios con un sistema de gestión ambiental muy robusto que le permite desarrollar su actividad respetando en todo momento el entorno natural y minimizando cualquier impacto. Como explica la jefa del departamento de Medio Ambiente, Reyes Parga, “dentro de la estrategia ambiental de MATSA, las prioridades son garantizar la sostenibilidad en el uso del agua y en las modalidades de consumo y producción, y llevar a cabo proyectos para la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas, además de sumarnos a la lucha contra el cambio climático”.
Entre los principales logros conseguidos por la empresa en esta materia destacan los vinculados al consumo de agua y a la superficie ocupada por las instalaciones. En lo que respecta al consumo de agua, la compañía realizó una importante inversión para dotar a la operación de las mejores técnicas disponibles para su tratamiento, lo que ha hecho posible no solo operar con plenas garantías de protección ambiental, sino poder incrementar la recirculación del agua y disminuir el consumo externo y el vertido. En este sentido, Parga destaca que, “a pesar de que en 2019 el consumo de agua fresca aumentó debido a la baja pluviometría, el porcentaje de recirculación del agua llegó al 100%, cerrando el año con cero metros cúbicos de vertido al exterior”.
En referencia a la ocupación del suelo, la compañía ha conseguido minimizar significativamente la huella generada por las instalaciones. Esto ha sido posible “gracias a la reutilización de los residuos mineros o con proyectos innovadores, como el aprovechamiento integral del depósito de pasta, que ha permitido duplicar su capacidad de almacenamiento sin tener que incrementar la huella”, resalta la jefa de Medio Ambiente.
Entre las actuaciones destacadas en materia ambiental se encuentra también el desarrollo e implementación de procedimientos para el cálculo de la huella de carbono, propiciando un punto de partida para analizar oportunidades de reducción de gases de efecto invernadero y poderlo llevar a cabo en un Plan de acción. Por otro lado, se está trabajando en la elaboración y publicación de la primera Memoria de Sostenibilidad según indicadores GRI (Global Reporting Initiative).
A todo ello, se le suman otros proyectos relacionados con la protección de la biodiversidad, como la elaboración y publicación de una Guía Etnobotánica realizada en 2019 con la colaboración de diversas entidades locales y vecinos, o la creación de una Red de Voluntariado Ambiental, proyecto que ha arrancado en 2020 y que se encuentra aplazado debido a la actual crisis sanitaria.
Reyes Parga explica que otra de las prioridades de MATSA es involucrar tanto a los trabajadores como a la sociedad en general en los proyectos ambientales de la empresa. Según destaca, para conseguirlo, “la compañía cuenta con un buen número de campañas de sensibilización y comunicación externa dirigidas, especialmente, a empleados, entidades locales y vecinos. Apostamos por su implicación a través de la comunicación y del fomento de la participación, para alinearlos así a nuestros estándares ambientales como elementos fundamentales”
Entre los objetivos a corto plazo, el departamento de Medio Ambiente de MATSA está inmerso en un plan de mejora de la gestión actual de los residuos industriales y domésticos que se generan en la operación con la finalidad de incrementar el porcentaje de reciclado y valorización de dichos residuos. Además, está implementando desde la cadena de mando un plan de inspecciones ambientales, actualizando los planes de restauración, realizando el cálculo de nuestra huella hídrica y trabajando en un proyecto de investigación y desarrollo para seguir optimizando la gestión actual de las aguas.
Junto a todo ello, como destaca Reyes Parga, el objetivo principal es “mantener el bajo índice de incidentes ambientales que venimos registrando en los últimos años”. Siempre impulsando un modelo de minería responsable con el entorno y con la conservación de la biodiversidad y los ecosistemas para que puedan ser disfrutados por las generaciones futuras.