La Junta se acoge al préstamo del FLA de 210 millones para compensar el IVA 2017
La Consejería de Hacienda anunció el 27 de mayo la presentación de un recurso contenciosoadministrativo por una deuda de 534 millones por la falta de liquidación de un mes de dicho año
El Gobierno andaluz va a concertar en este mes una operación de endeudamiento por importe de 210 millones con cargo al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) para compensar la falta de ingresos derivada de la falta de la liquidación de un mes del IVA del ejercicio 2017, que el Ejecutivo autonómico ha cifrado en 534,3 millones de euros, y es objeto de litigio con la Administración General del Estado, hasta el extremo de que el 27 de mayo la Consejería de Hacienda anunció la presentación de un recurso contencioso-admininistrativo para conseguir esa liquidación en vía judicial.
El Consejo de Gobierno abordó en su reunión de 26 de mayo el Decreto 79/2020, que autoriza la concertación de operaciones de endeudamiento hasta un importe máximo de 210 millones de euros, publicado el 1 de junio en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y cu
La amortización se efectuará mediante ocho cuotas anuales de 26,25 millones
ya entrada en vigor se determina “el día de su aprobación por el Consejo de Gobierno”.
La memoria económica y funcional del decreto, que rubrica la directora general de Tesorería y Deuda Pública, María Victoria Carretero Márquez, señala que esta operación de endeudamiento recibió el 14 de mayo el beneplácito de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos del Gobierno para que la Junta de Andalucía recibiera “recursos adicionales destinados a cubrir necesidades de financiación derivadas de la desviación del objetivo de déficit de 2019 pendientes de financiar” y que la cantidad aprobada por ese concepto es de 210 millones de euros.
El informe de la Dirección General de Tesorería y Deuda Pública sostiene que “para elaborar el cálculo de los gastos que generan las mencionadas operaciones de endeudamiento, se estima que el importe global del endeudamiento se financiará con un contrato de préstamo con cargo al Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas a través del compartimento Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), en las condiciones fijadas por el mencionado acuerdo del 14 de mayo, que establece que las cantidades asignadas para financiar desviaciones del objetivo de déficit pendientes de financiar hasta el importe del impacto del SII IVA devengarán un tipo de interés del 0% (aplicable al importe total que corresponde a Andalucía)”.
Según la información anexa de la Consejería de Hacienda los 210 millones de euros se amortizarán hasta el 31 de mayo de 2032, periodo que incluye 4 años de carencia de amortización del principal. En el informe se señala que la fecha de formalización será en este mes de junio.
La amortización de los 210 millones la afrontará el Gobierno andaluz mediante ocho cuotas anuales, cada una de ellas por importe de 26,25 millones de euros, “constantes y consecutivas, pagaderas los días 31 de mayo de cada año hasta la fecha de vencimiento, comenzando la primera el 31 de mayo de 2025 y la última el 31 de mayo de 2032”, así como que el tipo de interés de la financiación será de un 0% y que está exenta de comisiones.
En la memoria económica del decreto 79/2020 se señala que “el ingreso derivado de la operación de endeudamiento se imputará a la partida presupuestaria de ingresos 0000010000/I/90000/00 01, Emisión de Deuda Pública autorizada por Ley de Presupuesto”, partida cuya previsión de ingresos para el Gobierno andaluz es de 5.348,74 millones de euros.
Andalucía cumplió el objetivo de déficit de 2019 tras un superávit presupuestario de 32 millones de euros, un 0,02% en términos relativos, pero finalmente se ha acogido a la fórmula que empezó a ofrecer el Ministerio de Hacienda para compensar la merma de ingresos derivada de la liquidación del IVA de 2017, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebró el 7 de febrero, y que el consejero de Hacienda, Industria y Energía, Juan Bravo, rechazó con el argumento de que ese préstamo entraña endeudarse.
El cierre de 2019 por Andalucía con un superávit de un 0,02% se produce tras descontar el Gobierno el efecto de la recaudación del IVA. De no haber practicado esta operación contable, según el cuadro que difundió el Ministerio de Hacienda, el déficit presupuestario de Andalucía habría sido de un 0,27%, un saldo presupuestario negativo de 446 millones en términos absolutos.
Bravo compareció la pasada semana, el miércoles 27 de mayo, en la Comisión de Hacienda del Parlamento de Andalucía, donde respondió a una pregunta de Ciudadanos sobre el IVA de 2017 impagado a Andalucía. El consejero de Hacienda sostuvo en su respuesta, según figura en el Diario de Sesiones del Parlamento de Andalucía, que “nosotros queremos el IVA, yo no quiero más deuda”.
En la Memoria Económica y Funcional para la concertación de operaciones de endeudamiento por un importe máximo de 210 millones de euros de la Dirección General de Tesorería y Deuda Pública se menciona el acuerdo del Consejo de Gobierno de 24 de febrero, que supuso la adhesión de Andalucía al compartimento Fondo de Liquidez Autonómico del Fondo de Financiación a Comunidades Autónomas para 2020.
Así como el hecho de que el Consejo de Gobierno ha autorizado hasta la fecha la concertación de operaciones de endeudamiento hasta un importe global de 3.314.210.000 euros, correspondiente a las necesidades de financiación del primer y segundo trimestre de 2020.
“En virtud de dichas autorizaciones, se han formalizado operaciones de préstamo con el Fondos de Financiación a Comunidades Autónomas hasta el importe máximo autorizado”, indica el texto.
El Gobierno andaluz se acoge finalmente a la fórmula ofrecida por el Ministerio de Hacienda
Catorce velas sopla el Metro de Málaga. Tantas como años transcurren desde aquel 7 de junio de 2006 en que las autoridades del momento, con Manuel Chaves, entonces presidente de la Junta de Andalucía, a la cabeza, simbolizaban la puesta de la primera piedra de un proyecto que, a día de hoy, sigue incompleto y sin certeza clara del momento en que será culminado. De la fotografía de aquel instante histórico para la capital de la Costa del Sol, de la que formaban parte también la entonces ministra de Fomento Magdalena Álvarez y la consejera de Obras Públicas Concepción Gutiérrez, sólo se mantiene activo y en el mismo cargo el alcalde, Francisco de la Torre.
Poco o nada en relación al proyecto el Metro ha sido como se esperaba. Ni los plazos de ejecución ni los costes de inversión. Todo se ha multiplicado de manera exponencial respecto a la base que sirvió de arranque para el suburbano. Aquel ferrocarril urbano original iba a costar del orden de 403 millones (incluyendo el material móvil); acabará costando más de 900 millones una vez sea prolongado hasta el entorno del Hospital Civil (pieza que está pendiente de ser materializada en los próximos años).
Su coste global, incluyendo en la ecuación los valores de mantenimiento y subvención durante todo el periodo de explotación, ha pasado en este intervalo de tiempo de unos 1.200 millones a alrededor de 3.000 millones.
Ésta es la dimensión real de la losa económica que va a suponer para la Junta de Andalucía (de momento, la única que afronta su financiación en ausencia del Ayuntamiento de la ciudad, que, por convenio, también está obligado a ello) hasta el año 2042, cuando culminará el contrato firmado con la concesionaria.
De los socios originales que la integraron, con FCC como principal actor, sólo se mantiene Comsa y la propia Agencia de Obra Pública (dependiente de la Junta). El capital principal, con un 75% del global, está en manos de dos fondos de inversión franceses, Infravía y Mirova, atraídos por el negocio que ofrece la infraestructura malagueña dadas l as condiciones ventajosas de la concesión.
¿Y los plazos? La variación de los mismos dejó de ser noticia hace mucho tiempo. Conforme a la oferta adjudicataria para la construcción de las líneas 1 y 2, así como para su explotación comercial, el Metro tendría que haber conectado los extremos de los dos ramales, en el Martín Carpena y Teatinos, hasta la estación de la Malagueta en febrero de 2009. Once años después de que fuese inaugurado de manera parcial a finales de julio de 2014, los trenes sólo recorren el trayecto en forma de V, que tiene como punto de unión el intercambiado de El Perchel, junto a la estación de trenes.
Un itinerario alejado del centro neurálgico de la ciudad, con el consiguiente efecto negativo en lo que a la demanda de pasajeros se refiere. Aunque la cifra de viajeros del Metro ha ido creciendo anualmente por encima del 10% desde que los trenes echasen a andar están en las antípodas de los 20,7 millones acordados por la Administración regional y los socios privados para garantizar la viabilidad de la iniciativa.
El detalle no es baladí, ya que la Junta está obligada a compensar económicamente a la concesionaria por los retrasos acumulados y por los pasajeros que no se montan en el suburbano. En los cinco primeros ejercicios de explotación del ferrocarril urbano esta suma ha sido de 346 millones de euros, sin contar con lo presupuestado para 2020, que es de 75 millones.
La nueva dilación en el calendario de finalización, (el último compromiso de la Junta era llegar al centro y al Hospital Civil en noviembre de 2020) traerá con
sigo una nueva renegociación de las condiciones contractuales. Asunto del que por el momento no se han ofrecido detalles por parte de la Junta.
La pieza pendiente, la extensión del trazado desde El Corte Inglés hasta Blas de Lezo (pasando por Hilera, Santa Elena y Eugenio Gross) queda aún por delimitar. Los movimientos realizados hasta el momento por la Consejeria de Fomento, tras enterrar la apuesta anterior de llevar el trazado en superficie, han permitido impulsar la contratación de la redacción del anteproyecto y el proyecto constructivos de un ramal soterrado. La formalización de ese contrato se espera para este mismo mes. A partir de ahí, un plazo de unos 18 meses para tener ambos documentos, esenciales para sentar las bases técnicas y presupuestarias de la ejecución de esta parte de la infraestructura.
Para la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, la presente efemérides “ilustra con claridad la fallida planificación por parte del anterior Gobierno socialista de la principal obra de la Administración autonómica en el área metropolitana de Málaga”.
Frente a ello, puso en valor que el actual equipo de la Consejería ha sido capaz de introducir “confianza y certidumbre ante la ciudadanía, comerciantes y el Ayuntamiento de Málaga en cuanto al cumplimiento de hitos”.
De manera directa aludió a la reapertura del Puente de Tetuán del lateral norte de la Alameda Principal y a la previsión de completar a principios de julio la restitución de la Avenida de Andalucía, tras una década afectada por el Metro. “Avanzamos además en todas las actuaciones pendientes para abordar la puesta en servicio de los dos tramos del Centro y en la planificación de la prolongación hasta el Hospital Civil, con una solución consensuada con el Consistorio”, destacó.
Marifrán Carazo
Consejera de Fomento
Esta efemérides ilustra con claridad la fallida planificación por parte del anterior Gobierno”