Fallece el actor Pepe Martín
Su popularidad estuvo unida a ‘El conde de Montecristo’ entre sus muchas apariciones en los años 60 y 70 Fue pionero del teatro en catalán en TVE
Francisco Andrés Gallardo Más allá de toda su trayectoria teatral y su abundante participación televisiva en la época dorada de Estudio 1 y los dramáticos grabados (e incluso emitidos en directo) en blanco y negro, el gran público relaciona a Pepe Martín con la Novela de El conde de Montecristo. Tuvo tal éxito hace 51 años esta serie que el actor se mantuvo siempre unido al recuerdo del personaje de Dumas, Edmundo Dantés. Fue una afortunada adaptación a cargo de Pedro Amalio López, uno de los realizadores fundamentales de RTVE, que también grabó escenas exteriores en cine, aspecto que en su momento veían mal los críticos de TV. Poco después protagonizó en Novela la popular El clavo y también encarnó al periodista Larra, en una semblanza biográfica emitida en 1977.
Pepe Martín fallecía este domingo a los 87 años por una dolencia cardíaca tras haber sido atendido el miércoles en un hospital madrileño. Nacido en Barcelona en 1932, estaba retirado de la escena, pasión que descubrió en su etapa universitaria en París, cuando estudiaba Derecho. Su debut fue con el Teatro Nacional Popular francés, con la comedia Ejercicio para cinco dedos continuando Largo viaje hacia la noche antes de recalar de nuevo en nuestro país, donde se hizo conocido por sus apariciones televisivas. El realizador que lo fichó fue el más prolífico de aquellos años, Juan Guerrero Zamora. Su primera obra fue El galán del bosque petrificado. Su última aparición, en 2010, fue episódica en la serie de Telecinco Hospital Central y años antes fue Jorge Lastra, amigo de don Pablo (José Sancho), en Cuéntame cómo pasó. En 1985 intervino en un serial de sobremesa precursor de las series vespertinas de hoy, Veraneantes.
Participó en los primeros dramáticos en catalán de TVE ( Joc de taula o La ventafocs en 1965) y entre sus doce intervenciones en Estudio 1 figura el Don Juan Tenorio de 1973, La malcasada o Mesas separadas.
Martín no se prodigó mucho por las pantallas a lo largo de este siglo, pero en el primer FesT Val de Vitoria, donde se le homenajeó, seguía presente su labor en uno de los primeros grandes fenómenos mediáticos de la cadena pública. El conde de Montecristo se estrenó en 1969, se repuso en 1977 y, en la Segunda Cadena, en 1981, como mejor exponente del dramático seriado de los años pioneros de TVE (se grababa en los estudios de Miramar de Barcelona, no en Prado del Rey). Una joven Emma Cohen debutaba en televisión en esta serie junto a dos actores habituales de la cadena pública por entonces, Pablo Sanz y José María Escuer, los villanos de una Novela que tuvo gran repercusión en su franja de tarde. La adaptación de Dumas fue en su momento la serie española más larga, 15 capítulos media hora.
Primer actor de la compañía Tirso de Molina en la iniciativa pública Festivales de España, entre sus montajes teatrales destaca El beso de la mujer araña, de Manuel Puig, junto a Juan Diego; o Los abrazos del pulpo, de Molina Foix, con Julieta Serrano. En cine rodó Piso de soltero (1964) con guión de Jaime de Armiñán; Oficio de muchachos, 1986, de Carlos Romero Marchent; La conjura de El Escorial (2008) o(2008). Pero por encima de todo, está su decrépito y barbado reo en el castillo de If.