Cuadro de honor

La vida de Paula Bautista Barrero es una vida de amor y respeto hacia las personas con discapacidad. Nació en Almonaster la Real, un pueblo serrano de la provincia de Huelva, donde transcurrió su infancia. Huelva capital la acogió después, cuando empezó a trabajar en una tienda en el centro de la ciudad. Su primer contacto con Rafael Pozo nació cuando el padre fue a predicar a Almonaster en marzo de 1969. Allí creció ese lazo de amistad. Fue tanta la complicidad y la confianza que generó en Rafael que este pidió su colaboración para sus proyectos en Huelva, donde era necesario poner en marcha recursos y servicios que mejoraran la calidad de las vidas de las personas con discapacidad y en situación de exclusión social, sin obligarles a abandonar su propio entorno familiar y social. Paula Bautista, desinteresadamente, y desde su propia casa, representó a Paz y Bien y la Fundación Tutelar Tau de Huelva como delegada. Durante este tiempo se creó la sede en Huelva, en la C/ Puerto 1-4 F, donde actualmente está. Y se comenzaron a construir los centros de El Múrtigas (Galaroza), R. A. Chanza (Cortegana), la Residencia de Menores La Dehesa (Corteconcepción) y el Centro de Servicios Especializados El Andévalo. Queremos agradecer a Paula su apoyo como voluntaria, siempre prestado con Paz y Bien y la Fundación Tutelar Tau, y su motivación, que siempre ha sido la misma: trabajar por los más desfavorecidos. Su manera de abordar el trabajo es insuperable y ejemplar. Gran parte del

éxito de nuestro equipo se debe a sus habilidades y su arduo esfuerzo. Paula, apreciamos tu tiempo y todo lo que hiciste para mantener todos nuestros proyectos funcionando sin problemas. Gracias por el gran apoyo brindado. Gracias, de corazón. Rocío Maestre