Cáritas atiende diariamente a más de 30 personas en la provincia
Parejas jóvenes con hijos, y mayores de 45 años, entre los más necesitados
El número de personas atendidas en Cáritas en 2019 en la provincia de Huelva asciende al 2,1% de la población. El número de usuarios baja en 3.014 y se sitúa en 11.077, más de 30 al día. Así se recoge en la memoria anual, un documento que muestra el trabajo realizado por la entidad y que es una radiografía de la realidad de la provincia.
El descenso de las personas atendidas se atribuye a un repunte en la economía y a más accesibilidad al empleo, lo que contribuye a que menos ciudadanos tengan la necesidad de acudir a Cáritas.
No obstante, se incrementó el número de atenciones realizadas a los usuarios. Éstas ascendieron a 124.805, lo que supone un aumento del 2% respecto al año anterior. En toda esta labor social Cáritas invirtió 2.473.102 euros, dinero procedente de fuentes privadas, públicas, donaciones y legados e ingresos de Cáritas Parroquiales. Estos últimos ascienden al 45% del total de la financiación. Las donaciones y legados, al 16%, las fuentes públicas, al 30% y las privadas, al 9%.
En cuanto a la distribución de los recursos económicos, más del 50% va para el área de Familia, Acogida y Asistencia, a la que le sigue la de la Exclusión, con el 27%, y la de Empleo y la Formación, con el 8%.
La directora de Cáritas Diocesana de Huelva, Pilar Vizcaíno, y la responsable del Departamento de
Comunicación y Relaciones Externas, Peña Monje, presentaron la memoria anual de 2019. Monje apuntó que de las 11.077 personas atendidas, 7.959 lo fueron en el programa de Acogida, 1.023, en el de Familia; 767, en el de Personas sin hogar; 993, en el de Migrantes; 311, en el de Empleo, y 24, en el de Salud, resultando en el programa de Acogida 18.686 ciudadanos beneficiados; en el de Familia, 2.664, y en el de Empleo, 930.
Peña explicó que de los 311 participantes en el Programa de Empleo, 125 encontraron trabajo en 2019, y resaltó las 767 personas sin hogar que pasaron por el Centro de Día de Puertas Abiertas y las casas de acogida Santa María y Santa María de los Milagros.
En cuanto al perfil de las personas atendidas éste responde a parejas jóvenes con hijos a su cargo, jóvenes sin estudios y con escasa experiencia laboral, mayores de 45 años, e inmigrantes con estudios superiores que no pueden convalidar, sin ingresos y que tienen familia a su cargo.
La responsable del Departamento de Comunicación y Relaciones Externas destacó la labor de los voluntarios, 757, y de las empresas colaboradoras, 46, que han permitido seguir con los proyectos, así como de las 242 hermandades, con sus donaciones.
La directora de Cáritas Diocesana de Huelva alertó de que “la situación de la precariedad se enquista”, a lo que añadió que “los colectivos atendidos no reúnen los requisitos para poder despuntar”, eso significa incremento de atención, la entidad “atiende a la familia en toda su integridad”.
Vizcaíno indicó que “se intenta conocer la situación real de las personas y familias y ayudar en toda su dimensión, se les da una respuesta social para que consigan su autonomía”.
Comentó que la cronificación de la pobreza se debe a la insuficiencia en el empleo y a la precariedad del mismo, a lo que se une la falta de formación para acceder a un puesto de trabajo, y a la dificultad para acceder a una vivienda. “No hay vivienda pública suficiente”.
Manifestó que “hay latinoamericanos que viven hacinados en viviendas y hay parroquias que les están pagando el alquiler porque cuando les caduca la documentación de refugio o asilo no tienen
Los colectivos atendidos no reúnen los requisitos para poder “despuntar”
los requisitos ni para acceder a un empleo ni para poder alquilarse una vivienda y hay parroquias que están detrás, intermediando de alguna manera, para alquilarles a ellos una vivienda”.
Por otra parte, incidió en que la pobreza en intergeneracional, “la pobreza se transmite de generación en generación, esa situación también la vamos viendo y provoca enquistamiento, dificultad para una vida digna”.
Otro de los aspectos que han detectado es la falta de formación, “la ausencia de estudios o de preparación para acceder al mercado laboral”.
En cuanto al colectivo de las personas en situación de exclusión, señaló que Cáritas “suple lo que las administraciones no hacen, pero vamos viendo que hay pocos recursos para este tipo de colectivos, también está cronificado, la cifra de atendidos es de 767, la cifra es siempre la misma, no cambia”.
Subrayó que el colectivo de personas inmigrantes en los asentamientos “es especialmente vulnerable”. Es un ámbito en el que “se está cronificando la realidad de ausencia de una vida normalizada”.