Vizcaíno critica el cierre de las administraciones con la pandemia
Señala que “ha sido un caos, debería haber mayor coordinación”
Durante el estado de alarma por el coronavirus “las administraciones no han debido quedar cerradas”. Así lo manifestó la directora de Cáritas Diocesana de Huelva, Pilar Vizcaíno, que apuntó que “hay servicios de las administraciones que han quedado completamente cerrados y nosotros y otras entidades privadas y ONG hemos tenido que suplir la ausencia de recursos públicos por parte de administraciones de todo tipo”.
Vizcaíno lamentó “el caos que se ha originado de competencias”. Subrayó que “ha sido un pleno caos, yo creo que las administraciones deberían haberse coordinado y haber dado una respuesta desde la urgencia”. Reconoció que esta situación “nos ha desbordado a todos pero estábamos muchas fuerzas sociales queriendo ayudar y he echado de menos la coordinación entre los que estábamos ayudando en primera línea y entre ellos, en gran medida”.
Comentó que en una situación como ésta “entiendo que hay servicios que no se pueden cerrar porque hay personas que han tenido mucha desinformación, llamando a líneas telefónicas que nunca se cogían, a servicios que no sabían si iban a obtener algún tipo de respuesta”, a lo que añadió que “ha sido un poco todo caótico”.
Explicó que “en pleno Covid nos hemos tenido que volcar con empresas privadas para dar respuestas porque las administraciones han estado cerradas y hemos llegado a acuerdos con ellas, hemos podido ofrecer trabajo. Para nosotros es fundamental trabajar el ámbito privado y llegar a acuerdos con las empresas en este sentido”.
Por otra parte, señaló que hay ausencia de recursos formativos para el empleo para determinados colectivos. “Para Cáritas es esencial una formación que permita una interacción laboral y en eso estamos trabajando con cursos de empleo y de formación y de trabajo en habilidades sociales y laborales”.
Como consecuencia del coronavirus han acudido a Cáritas perfiles nuevos, “personas que nunca se habían visto en una situación como ésta y otras que en su momento fueron atendidas por Cáritas y han vuelto a llamar. Entre los atendidos, ciudadanos que se han visto en la calle, los que no cobraban los ERTE, lo que no tenían ahorros, los que han visto la situación desbordada por circunstancia de enfermedad, ha habido enfermos de Covid a los que hemos tenido que hacerles acompañamiento, familias con Covid con un enfermo de cáncer al que hemos tenido que hacer un acompañamiento personal en su casa, camareros, comerciantes y universitarios cuyos padres se han quedado en paro”.