Los sanitarios franceses instan a Macron a ordenar un “verdadero confinamiento”
La saturación de las UCI en Francia ha provocado que el sector sanitario alce su voz para reclamar al presidente, Emmanuel Macron, un “verdadero confinamiento” que permita rebajar la presión a la que se ven sometidos.
A la espera de que la estrategia de vacunación pueda traducirse en una ralentización de la epidemia, su constatación es clara: sin medidas más restrictivas, sólo les queda como opción transferir pacientes a regiones menos afectadas, abrir nuevas camas de reanimación o seleccionar a los enfermos que pueden atender.
Y ninguna de esas posibilidades es completamente factible o satisfactoria, recalcó ayer un colectivo de nueve médicos en un artículo en Le Monde, donde subrayaron que “es hora de que el Ejecutivo asuma clara y públicamente las consecuencias sanitarias de sus decisiones políticas”.
Su llamamiento se suma al que el domingo le lanzaron en el dominical Le Journal du Dimanche otros 41 sanitarios, que insistieron en que no se habían visto sometidos a un colapso similar ni siquiera en los peores atentados terroristas registrados en los últimos años en el país. “Todos los indicadores coinciden para afirmar que las medidas actuales son y serán insuficientes para invertir rápidamente la curva alarmante de contagios”, indicaron estos 41 profesionales.
El jefe de la UCI del hospital parisino de Saint-Louis, Elie Azoulay, lo ejemplificó de forma gráfica: desde la epidemia de la polio en 1954, no ha habido otro periodo en el que todo el mundo llegue a las unidades de cuidados intensivos por la misma enfermedad necesitando los mismos tratamientos y la misma maquinaria.