Un seguro de vida para perros y gatos: la esterilización
● Una intervención a tiempo reduce el riesgo de tumores en hembras y agresividad en machos ● Entre felinos se evita un celo doloroso, difícil para la convivencia, y se evitan afecciones graves
CUANDO nos planteamos la idea de esterilizar a nuestra mascota, la información que podemos encontrar a través de diferentes canales, principalmente familiares, amigos e internet, es mucha, quizá demasiada. Hoy vamos a intentar explicar de forma sencilla el proceso de esterilización de nuestros compañeros peludos aportando todos los datos necesarios para que vuestra decisión esté basada en información fiable y veraz.
Lo primero que debemos saber es que la esterilización siempre aportará más beneficios que riesgos. En el caso de los machos, tanto perros como gatos, el principal motivo por el que nos planteamos la esterilización suele ser para evitar el marcaje en casa. Los animales no esterilizados tienden a marcar su territorio por lo que, llegada la edad adulta, empezaremos a encontrarnos por la casa pequeños regalitos en forma de charquitos de orina.
Esto es algo innato, ya que necesitan tomar posesión de su hábitat para que otros animales sepan quién vive en ese territorio, y tal cual lo harán también en casa. Lo que nos están queriendo decir es algo a sí como: “Hola, amigo, yo vivo aquí, esto es mío, aquí mando yo. Dejemos las cosas claras”.
El principal problema de este tipo de comportamiento es el olor que, en la mayoría de los casos, se hace insostenible debido a que el de la orina del animal macho es muy fuerte para marcar el territorio, y soportar esto en casa resulta verdaderamente difícil.
El otro gran problema con el que nos solemos encontrar en consulta con machos no esterilizados es la agresividad que desarrollan hacia otros machos. Obviamente, entre ellos intentan echar un pulso para demostrar ante otros animales quién está por encima de quién, lo que supone un grave problema en lugares con otros animales, especialmente hembras en celo.
En el ámbito de la salud del animal, el principal problema recurrente en gran parte de perros no esterilizados es la hiperplasia de próstata a partir de los cinco años. La próstata aumenta de tamaño y pueden aparecer quistes y abcesos prostáticos causantes de gran dolor al animal y dificultad para orinar con normalidad.
En el caso de las perras, es altamente recomendable la esterilización a una edad temprana, ya que, a medida que el animal pasa por un celo, la probabilidad de padecer un tumor mamario aumenta de manera significativa. Como ejemplo, si esterilizamos a nuestra perrita tras el segundo celo, la probabilidad de padecer un tumor de mama ya es de un 15-20%.
Una vez que el animal desarrolle tumores mamarios es necesario resolverlo mediante cirugía, sin contar con el riesgo de aparición de metástasis en el pulmón. También evitaremos la aparición de tumores ováricos y tumores de cuello de útero y las tan temidas piometras (infecciones de útero), que pueden ser mortales si no son diagnosticadas y tratadas a tiempo.
En estos casos, será necesaria una intervención de urgencia con mucho más riesgo que una esterilización programada.
También evitaremos los embarazos psicológicos, en los que no se produce la bajada de hormonas de una manera adecuada, lo que dará lugar a un comportamiento raro en nuestra mascota: obsesión con los muñecos, apatía, no querer salir a la calle, así como inflamación de las mamas y producción de leche en las mismas. Ante el embarazo psicológico es necesario un tratamiento médico para poder solucionar el problema antes de plantear la esterilización.
ESTERILIZACIÓN EN GATAS
En las gatas, en un 90% de los casos, la época de celo se vuelve insostenible, ya que tienen celos de manera continuada –muchas veces cada dos semanas– y el celo de los felinos es doloroso, con un nivel de vocalización alto (e insoportable en la mayoría de los casos) y nocturno, por lo que la convivencia en casa resulta muy incómoda.
Igual que hemos explicado en las perras, evitaremos las infecciones de útero y los tumores de mama, que en las gatas no esterilizadas aparecerán con una probabilidad altísima debido a la carga hormonal tan elevada.
Una vez que nos hayamos decido firmemente a esterilizar a nuestra mascota, es importante decidir dónde lo haremos, informarnos bien sobre la técnica quirúrgica que se empleará, el tipo de anestesia utilizada, los análisis previos a la cirugía, postoperatorio, etc.
Consulta a tu veterinario sobre la edad ideal para que tu mascota sea esterilizada, ya que varía según la raza y sexo del animal.
Pensad que estamos hablando de una cirugía que se realiza una vez en la vida y es fundamental poner a nuestro animal en buenas manos y bajo unas condiciones quirúrgicas óptimas. Desde el punto de vista veterinario, la esterilización siempre es altamente recomendable, tanto en machos como en hembras, ya que le estamos dando a nuestro animal un seguro de vida y una garantía de salud.
La esterilización es una vez en la vida, por lo que se recomiendan todas las precauciones