Las terapias
HIDROTERAPIA
El pensamiento primitivo ya encontró en el agua un remedio muy eficaz, con el que se podían lograr múltiples mejorías y curaciones. La interpretación moderna valora el agua solamente como portadora de energía calórica, con el que se aportan estímulos calientes y fríos al cuerpo. Estos estímulos producen un amplio espectro de reacciones fisiológicas, de las cuales las mejor analizadas son aquellas para la regulación circulatoria y hormonal. Los estímulos fríos tienen también unos efectos claros sobre el estado general. Se suministran en forma de baños, chorros, vertidos, lavados y cataplasmas (compresas, envolturas). En función de la sensibilidad y la habituación se realizan con diferentes temperaturas del agua, distintas duraciones y en zonas del cuerpo de distinto tamaño. Y se utiliza sobre todo el agua fría. El primer objetivo es generalmente el “estímulo”, es decir, provocar una sensación caliente, agradablemente relajante del cuerpo con un aumento reactivo de la circulación de la sangre en la piel, lo cual debe producirse al cabo de unos pocos minutos después del estímulo frío. Los tratamientos previos con calor sirven frecuentemente sólo para poder administrar con más intensidad el posterior tratamiento de frío. La hidroterapia está indicada para el tratamiento sintomático de dolencias agudas, pero sobre todo como una cura de varias semanas o como un elemento regular de la higiene diaria.
LOS BALNEARIOS / SPA
El tratamiento con baños atañe sobre todo a los manantiales medicinales naturales de determinados balnearios. En función de los contenidos predominantes disueltos en el agua se distingue entre agua de sal común o agua salina, agua de ácido carbónico o acidulada, aguas curativas de azufre, radón, hierro, yodo y otras. También se preparan baños artificiales (por ejemplo, con sales de baño, aditivos vegetales o por imprimación del agua con ácido carbónico), con frecuencia se efectúan también baños de lodo.
La hidroterapia está indicada para el tratamiento sintomático de dolencias agudas, pero sobre todo como una cura de varias semanas o como un elemento regular de la higiene diaria.
Los manantiales con una temperatura por encima de los 20 ºc se conocen como termas. Los contenidos de los baños desarrollan unos efectos específicos, por ejemplo sobre el riego sanguíneo en la piel (sobre todo el ácido carbónico), el sistema inmunológico (azufre), el material nucleico de las células (baños de radón) o la regulación vegetativa (baños de sal). Pero al mismo tiempo son interesantes también los estímulos más o menos inespecíficos de un manantial curativo sobre todo el organismo, así como los efectos sobre las funciones circulatorias y renales comunes a todos los baños. En el estado de menor gravedad se produce una relajación general, normalmente también anímica. Con frecuencia las aguas medicinales se utilizan así mismo para la inhalación (por ejemplo, la sal común para las enfermedades infecciosas de las vías respiratorias), o para curas hídricas (por ejemplo, las aguas sulfurosas para disfunciones del aparato digestivo o en la terapia de eliminación. Generalmente en el balneario se realizan tratamientos de serie que, sobre
todo en los países centroeuropeos, suelen durar 4-6 semanas y se combinan con distintas medidas adicionales para fomentar la salud. En España, el apartado de alimentación dietética en los balnearios y spa todavía tiene un amplio campo para mejorar.
CLIMATOTERAPIA
Se distingue entre climas relajantes con aire poco alergénico, condiciones de temperatura y de viento compensadas y sin bochornos, así como climas estimulantes, por ejemplo en el mar o en la alta montaña. La sola estancia en estos climas tiene efectos medicinales sobre la salud, pero como medidas adicionales se realizan, por ejemplo, curas de reposo en ambientes frescos o un entrenamiento físico, como la llamada “cura del terreno”.
HELIOTERAPIA
Junto a los rayos naturales del sol de primera y última hora, existe una helioterapia específica que aprovecha los efectos de los rayos ultravioleta de la luz solar natural o unos radiadores artificiales
En talasoterapia se aprovechan al mismo tiempo los efectos del clima costero, de la sal y de la radiación ultravioleta.
de rayos UVA, y al hacerlo se estimula el metabolismo de la vitamina D y la formación de sustancias inmunológicas mediadoras en las células de la piel. Con una correcta dosificación, la exposición solar periódica tiene efectos benignos sobre el metabolismo mineral y de los huesos, sobre la defensa inmunológica en general y sobre la regulación de la circulación. En talasoterapia (medicina de los medios marinos: agua de mar, algas, barros…) se aprovechan al mismo tiempo los efectos del clima costero, de la sal y de la radiación ultravioleta.
TERMOTERAPIA
Al contrario que en los estímulos térmicos de la hidroterapia, aquí interesan los efectos del calor y del frío en sí. Éstos se transmiten por sí solos a través de distintas combinaciones reflejas dentro del organismo y por los efectos de la temperatura modificada de los tejidos. Los efectos reflejos se utilizan sobre todo en el tratamiento de síndromes de dolor, el calor reduce entre otros el estado de tensión de la musculatura, y el calor y el frío frenan la conducción nerviosa de los impulsos de dolor. El exceso de calor de distintos tejidos sirve para estimular procesos infecciosos, para conducirlos a una curación definitiva. Aparte de los métodos tradicionales, también se utilizan procesos complicados con electroterapia, el tratamiento con ultrasonidos y la radiación con luz infrarroja. El frío se utiliza para amortiguar procesos infecciosos (crioterapia).
ELECTROTERAPIA
Ya en la Antigüedad se usaba el “pez torpedo” (Torpedo marmorata) para pro-
ducir electrochoques en el tratamiento de múltiples enfermedades. A partir del siglo XVII, con el progreso de los conocimientos de la electricidad artificial, se desarrollaron aparatos técnicos para los que hoy en día se han elaborado indicaciones muy justificadas de la electroterapia. Se emplean sobre todo corrientes continuas (galvanización) y corrientes alternas con una frecuencia de hasta 200 Hz (terapia de baja frecuencia). Los efectos más importantes se transmiten por la influencia sobre el sistema nervioso.
TERAPIA DEL MOVIMIENTO
Se apoya en la simple y general actividad física. Su significado clínico ha sido muy discutido en tiempos modernos, ya que generalmente la costumbre era cuidar a los enfermos y forzarlos lo menos posible. El gran cambio en el tratamiento del entrenamiento físico se produjo hace apenas unos 40 años con la rehabilitación activa de los pacientes coronarios (por ejemplo, el estado general después del infarto cardíaco). Desde entonces se han observado efectos positivos sobre casi todos los sistemas orgánicos inter-
Una dietética bien elegida es una terapia básica en muchas enfermedades, también fuera del aparato digestivo.
nos (especialmente la función cardiovascular, los bronquios y el pulmón). Además la terapia del movimiento tiene efectos positivos sobre distintas funciones metabólicas (por ejemplo, el metabolismo de los azúcares y de las grasas), la defensa inmunológica (por ejemplo, sensibilidad a las infecciones, con los primeros resultados positivos también en enfermedades malignas), y los estados psíquicos en pacientes depresivos y miedosos. La intensidad del entrenamiento se adapta cuidadosamente a la edad y a la capacidad física individual. En las terapias del movimiento pode- mos incluir los quiromasajes terapéuticos, la reflejoterapia y el drenaje linfático manual, junto a otras técnicas que también encontraréis en la revista y web de integral.
FITOTERAPIA
La European Scientific Cooperative on Phytotherapy define los remedios vegetales como “productos utilizados con fines médicos, que como componentes contengan exclusivamente plantas, partes de plantas, productos vegetales o sus combinaciones, de forma elaborada o no elaborada”. La medicina naturista asume el interesante trabajo de comprobar y de volver a demostrar un amplio terreno de ideas con tradición, experiencias e indicaciones con los métodos modernos de la investigación clínica. Al hacerlo, se encuentra con la dificultad de que con frecuencia las antiguas enfermedades no corresponden a nuestro moderno sistema nosológico. Los tratamientos más antiguos se basan en unos conceptos teóricos, que son ajenos a la medicina actual.
Algo similar ocurre cuando se quieren comprobar o adoptar nuevos preparados vegetales de la medicina de otras culturas. Sin embargo, los estudios revelan excelentes resultados con, por ejemplo, plantas adaptógenas de la Medicina Ayurvédica o plantas procedentes de la Medicina Tradicional China. En todo caso, la fitoterapia (uso de plantas medicinales con fines terapéuticos) debe compararse con las posibilidades de la farmacología moderna. Siempre se trata también la cuestión de la «planta completa», o de una sustancia individual para aislar, a la cual se le atribuye todo el efecto de la planta. En parte estas sustancias activas se han encontrado realmente, pero en la mayoría de los casos la planta completa tiene una mayor importancia que sus partes individuales. Además del control farmacológico clásico y algunos otros detalles funcionales, un punto clave de la fitoterapia consiste en la “reconversión” global y el tratamiento de la “constitución”, y también en el sentido de una terapia preventiva. Los productos fitoterapéuticos están disponibles para dolencias más simples, en las cuales la terapia con medicamentos sintéticos no es rentable (por ejemplo, en la relación beneficio-riesgo). Los efectos no deseados son extremadamente raros, de manera que los fitofármacos se utilizan preferentemente también en enfermedades de larga du- ración. Igualmente otras muchas veces también se utilizan a corto plazo, semanas, por ejemplo.
ALIMENTACIÓN Y TERAPIA
En medicina preventiva se informa y dan consejos en el sentido de la higiene en general y sobre el contenido y efectos de los componentes dietéticos importantes (oligoelementos, vitaminas, aminoácidos esenciales), la calidad y el contenido de distintas grasas, proteínas y carbohidratos. Al hacerlo, se tienen en cuenta nuevos resultados de los estudios epidemiológicos, que hacen mención a la importancia de la alimentación en la creación de disfunciones metabólicas y enfermedades circulatorias, pero también en la aparición de enfermedades cancerígenas y del sistema defensivo en general. En la terapia de la alimentación se trata también del propio sistema intestinal, porque se considera probable que éste también pueda ser la causa de otras enfermedades. Por eso una dietética bien elegida es una terapia básica en muchas enfermedades, también fuera del aparato digestivo. Algunos tratamientos importantes se basan en diferentes programas dietéticos, muchas veces también en el ayuno terapéutico.
PSICOTERAPIA ORIENTADA AL CUERPO
En parte se podría hablar también de una terapia del cuerpo orientada a la psique, pero generalmente las dos interpretaciones son igualmente relevantes. Se trata de unas técnicas, en las que unos procesos físicos deben ejercer una influencia positiva sobre lo anímico, y los procesos anímicos sobre los físicos (el cuerpo). Muchas veces se mejora o se vuelve a establecer así la relación entre el cuerpo y el alma, el equilibrio entre cuerpo y alma, o incluso la identidad. La persona se vuelve a encontrar a gusto dentro de su cuerpo, se experimenta a sí misma de mejor forma, y muchas veces también consigue una mejor relación con los demás y su entorno. La psicoterapia orientada al cuerpo se ha convertido en un elemento muy importante para dominar el estrés, la relajación en general, pero también el conocimiento. Entre los métodos más orientados al cuerpo (por ejemplo, la terapia de la respiración) se incluye la meditación (ver artículo al final de la revista) y con ellos se viven más intensamente los elementos de la actividad física (por ejemplo, la inspiración y la espiración, el movimiento, el habla). Al hacerlo se toma conciencia de los problemas anímicos y de las inhibiciones, que se procesan también verbalmente. En los métodos principalmente orientados hacia lo anímico, como el entrenamiento autógeno, se emplean en primer lugar elementos de meditación que después pueden admitir o estimular también procesos físicos. Otras técnicas importantes son los diferentes métodos de relajación de la fisioterapia (por ejemplo, la relajación progresiva según E. Jacobson), la relajación funcional (M. Fuchs), el concepto de pedagogía del movimiento de Feldenkrais, el análisis bioenergético según Reich y Lowen, el yoga de las tradiciones hindúes, el Qi-gong de la tradición china y la euritmia curativa de la medicina antroposófica.